La indignación absoluta por la exhibición con dolo del cuerpo de Ingrid Escamilla, víctima de feminicidio el pasado 9 de febrero, ocasionó que mujeres organizadas se pronunciaran en rechazo total a medios que exhiben los cuerpos de las víctimas.
De acuerdo a la Carta abierta contra la violencia de género, firmada por ciudadanas, asociaciones y colectivos, publicada por la asociación civil, El Día Después, el actuar de diarios como La Prensa y ¡Pásala! y otros medios digitales, son actos irresponsables inhumanos y revictimizantes, además de perpetuar esquemas de violencia. Denunciaron que estos actos transgreden lo dispuesto en diversos artículos previstos tanto en la Ley Federal Para Prevenir y Eliminar la Discriminación, como de la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. Las autoridades están obligadas a vigilar y sancionar a los medios de comunicación que violen la ley.
“El papel de los medios de comunicación es crucial en la violencia contra las mujeres. Tanto en la visibilización, denuncia, investigación e información, sobre la violencia como en la desinformación, la creación de prejuicios, el fomento de juicios e interpretaciones machistas y misóginos. Por su alta incidencia e influencia en la orientación de mentalidades, los medios son claves porque educan en la aceptación de la violencia contra las mujeres e incluso en las formas de realizarla, al difundir de manera creciente actos de violencia, con una mirada complaciente y normalizadora y al tratar de manera amarillista los atentados contra las mujeres.”
Dra. Marcela Lagarde y de los Ríos
En un país como México, que padece una epidemia de violencia contra las mujeres, es necesario plantearse la responsabilidad de retratar e informar lo que sucede en reconocimiento de los derechos y limitaciones de la profesión.
En la carta, exhortan a los medios, digitales, impresos o televisivos a respetar la dignidad de cada persona y la de sus familias. Del mismo modo respetar el derecho a la imagen propia, a la vida y a la muerte. Es responsabilidad de los medios proteger a las víctimas y evitar difundir contenidos que hagan apología de la violencia o la estimulen.
AM.MX/xm