Carta Mesoamericana / Cd. de México
*Migración por motivos de inseguridad pública
*Lo hablamos por violencia dirigida, amenazas o persecuciones
Con frecuencia hablamos de migración económica, es decir, cuando las razones de los migrantes son pobreza, desigualdad y falta de oportunidades de empleo o desarrollo.
Hablamos también de migración por motivos de inseguridad pública o por violencia dirigida, como amenazas o persecuciones.
Y aunque desde hace algunos años las organizaciones internacionales empezaron a tratar la migración climática, su difusión aún está en curso, a pesar de ser, en realidad, la razón más antigua y poderosa de la migración en la historia del ser humano.
Como comenta Dina Ionesco, directora de la División de Migración, Medio Ambiente y Cambio Climático de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM): “El Atlas de la Migración Medio Ambiental, que ofrece ejemplos que datan de hace 45 mil años, muestra que los cambios medioambientales y los desastres naturales han jugado un papel en la distribución de la población en nuestro planeta a lo largo de la historia”.
Los fenómenos naturales, y en particular ahora el cambio climático, siguen incidiendo en la migración forzada por razones ambientales, a tal punto que de 17.2 millones de personas que tuvieron que abandonar sus casas en 2018 debido a desastres naturales, se pasó a 30 millones en 2020. De acuerdo con el Banco Mundial, para 2050 habrá más de 216 millones de migrantes climáticos internos.
Dice Dina Ionesco que “es muy probable que los efectos creados directamente por el cambio climático o amplificados por éste, modifiquen ampliamente los patrones de asentamiento humano.
La degradación futura de la tierra utilizada para agricultura y la ganadería, la ruptura de los ecosistemas frágiles y el agotamiento de los recursos naturales vitales como el agua dulce afectarán directamente nuestras vidas y nuestros hogares”.
Si el cambio climático incide en la movilización forzosa de las personas y ello requiere atención preponderante, también habrá que considerar los efectos que puede tener en los lugares de llegada.
Por ejemplo, desde 1993 el presidente Bill Clinton dio inicio a la política de contención de la migración mediante el reforzamiento de la vigilancia fronteriza en los centros urbanos, con lo que empujó a los migrantes a intentar el cruce por zonas cada vez más inhóspitas y de alto riesgo, especialmente por sus altas temperaturas.
Están por cumplirse 30 años de esa política, que ha costado miles de vidas de migrantes mexicanos y de otras nacionalidades, y EU no parece tener la menor intención de modificarla, a pesar de que sus efectos puedan agravarse por la elevación de temperaturas en la franja fronteriza.
Apuntes apenas de un tema complejo e inevitable: identificar la vinculación, los efectos, y las eventuales soluciones, de la migración y el cambio climático.
Lecturas de la ONU y la OIM recomendadas: https://bit.ly/2KinO0s y https://bit.ly/3A6vls3 Ver también https://bit.ly/3c4iU7X
(Mauricio Farah)