viernes, abril 19, 2024

México debe tomar una serie de medidas muy duras y decisivas: ITAM

CIUDAD DE MÉXICO.- El Gobierno Federal necesita delinear un plan de estímulos fiscales para las empresas, pero también de apoyos a personas, sobre todo en condiciones vulnerables, y con ello paliar los efectos que sobre el desempleo y la economía tendrá la pandemia del Covid-19, coincidieron en señalar especialistas convocados por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) al panel online sobre las Repercusiones Económicas del COVID-19 en México.

En el panel participaron Jorge Suárez Vélez (Director Gerente de ACIA, Nueva York), Dr. Carlos Serrano (Economista en Jefe de BBVA), Dr. Miguel Messmacher (ex Subsecretario de Hacienda) y Dr. Alejandro Hernández (Vicerrector del ITAM).

En su intervención Miguel Messmacher, catedrático del ITAM y exsubsecretario de Hacienda, dijo que debido a que el gobierno está en una situación delicada en finanzas públicas y en la mira de las calificadoras, se deben de tomar una serie de medidas muy duras y decisivas.

Indicó que se deben hacer esfuerzos fiscales para ayudar a las empresas y personas, y con ello estabilizar la situación. Además de otorgar apoyos desde el gobierno, pero muy cuidadosos y focalizados, y consideró que en el apoyo a las empresas, el sector financiero privado tiene que entrarle, de la mano de la banca de desarrollo.

“El objetivo principal debe ser intentar evitar, de la mayor manera posible, la pérdida de empleos; que la Secretaría del trabajo contemple la posibilidad de que pueda haber arreglos como medios tiempos, para evitar despidos; parte de una estrategia fiscal y de financiamiento, donde tiene que entrar el sistema financiero privado”, agregó.

Consideró que, aunque habrá choques externos como internos, se debe poner especial énfasis en la caída de la demanda interna, donde las políticas domésticas pueden tener un papel mucho más importante.

“La duración de la caída de la demanda interna, determinará cuán fuerte será la caída en el PIB en el año. Ojalá se logre una serie de acciones que vayan permitiendo suavizar la caída de la demanda interna”, precisó.

Por su parte, Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA México lamentó que desde el gobierno federal se haya afirmado, hasta ahora, que no se ayudará a las empresas y sólo a las personas que más lo necesitan.

“Me parece desafortunado que la postura del gobierno sea que no se va a apoyar a las empresas sino sólo a las personas. Si se apoya a la empresa se salva al empleo”.

Destacó que inevitablemente habrá una recesión profunda de la cual México no será la excepción, pero que la profundidad dependerá de las medidas que se tomen, y desde ya, deben tomarse medidas más fuertes de aislamiento social para que el problema sea menos duradero.

“México se encuentra todavía en una situación de vulnerabilidad mayor, dado que ya se venía de una desaceleración con una baja en la inversión, y ahora con una mayor desconfianza tras las cancelación de la planta cervecera Constellation Brands. Hay mucho qué hacer y buscar que la recuperación sea lo más pronto posible. Son tiempos extraordinarios que requieren medidas extraordinarias”.

Comentó que primero debe fortalecerse el sistema de salud, después proteger a las empresas y el empleo; y una tercera línea de acción debe ser ayudar a la población más vulnerable.

Destacó que hay mucho qué hacer en lo fiscal, y consideró que, dadas las circunstancias, los objetivos fiscales deben pasar a un segundo término, para primero salvaguardar la salud de las personas y apoyar a las empresas con estímulos.

“Se deberían anunciar apoyos fiscales significativos y simultáneamente hacer la promesa de que una vez terminada la contingencia, se harán los ajustes fiscales necesarios, de tal manera que la recaudación aumente”, expuso.

También consideró que debe haber un redireccionamiento significativo del gasto, e incluso suspender algunos proyectos que, dijo, hoy no tienen rentabilidad, tal es el caso de la refinería y el Tren Maya.

Indicó que esos recursos deberían destinarse a tres frentes: fortalecer el sistema de salud; ayudar a empresas dándoles créditos fiscales; condicionando a que mantengan la plantilla laboral; y ayudar a la población más vulnerable.

En el caso de la banca, recordó que se ayudará a la población y empresas que tengan problemas de liquidez, al aplazar el pago de sus créditos, para evitar con ello problemas crediticios. “Debemos impedir que empresas que eran financieramente viables antes, desaparezcan por problemas de solvencia”.

Carlos Serrano agregó que en esta crisis que se avecina, el sistema financiero mexicano está en una situación de bastante solvencia, y que las medidas que se han anunciado hasta ahora, permitirían que esto no se traduzca en un deterioro del sistema financiero.

En este sentido comentó que si la crisis se resuelve en seis u ocho meses, el sistema financiero local tiene liquidez que le permitiría enfrentar esta situación. “El sistema financiero será una fuente que ayudará a absorber el choque y no a propagarlo”.

Conclusiones en torno a México:
1. La pandemia coincide en México con tendencias que potencian su impacto:
A. Caída dramática y duradera en el precio del petróleo, con coberturas muy limitadas.
B. Deterioro del crédito; grado de inversión en riesgo.
C. Dólar crecientemente fuerte.
D. Señales muy negativas a inversionistas internos y externos con la cancelación de Constellation, entre otras medidas.
E. Un sistema de salud en extrema debilidad.
2. Medidas deseables:
A. Cuatro urgencias:
a. Sobrerreaccionar en lo epidemiológico. Iniciamos tarde y no tenemos las capacidades de detección y rastreo ni la cultura de responsabilidad cívica que han sido clave en países con éxito relativo en la contención de la pandemia.
b. Fortalecer el sistema de salud cuanto antes en lo más urgente.
c. Proteger empresas y empleo. Atender urgencias de liquidez.
Evitar que quiebren las empresas que eran solventes y productivas antes de la crisis.
d. Atender a la población más vulnerable en forma muy focalizada.
B. La austeridad y el cuidado de la inflación no son objetivos centrales para estos momentos. Urge un paquete de apoyos y créditos fiscales, sujetos a la preservación de empleos, con una reforma fiscal a futuro pero acordada junto con el paquete para dar mayor tranquilidad a los mercados. Estímulo fiscal no menor al 0.5% del PIB; es posible que se requiera hasta el 3%, cuidando la estabilidad macro dentro de límites razonables.
C. La política monetaria tendrá que ser aún más laxa. Con el colapso de la demanda agregada, la inflación será baja. Hay que inyectar liquidez para que fluya el crédito a tasas bajas, con garantías de la banca de desarrollo.
D. Sería ideal un redireccionamiento significativo del gasto, suspendiendo proyectos sin clara rentabilidad social (Tren Maya, refinería, etc.).
E. En lo laboral, explorar esquemas de trabajo a tiempo parcial.
3. Posibles efectos adicionales de la crisis:
A. Los niveles de pobreza y desigualdad se van a exacerbar, con presiones sociales, políticas y de seguridad crecientes.
B. Fortalecimiento de ánimos nacionalistas y proteccionistas a nivel internacional. Presiones políticas en EE.UU. para demorar la entrada en vigor del TMEC.
4. Pronósticos:
A. Etapa de gran incertidumbre por al menos el resto del año.
B. Desplome de la demanda interna. Impacto en la caída de entre 3.5 y 7% del PIB en 2020. Será muy probablemente una recesión profunda y duradera.
C. Contracción en las exportaciones, a pesar de mayores ajustes del tipo de cambio.
D. Caída importante en la entrada de remesas. Posible retorno masivo de migrantes indocumentados.
E. Difícil que México sustituya a China como proveedor confiable de EE.UU., si continúan las políticas del actual gobierno en México.
F. Gran incógnita: ¿Surgirán pronto contrapesos de la sociedad civil y nuevos liderazgos?
AM.MX/fm

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