Por EDGAR GONZÁLEZ MARTÍNEZ
Reactiva EU su bono a 20 años; ayer colocó 20 mil millones de dólares
La pelea mundial por atraer recursos financieros para reactivar la economía, apenas empieza. Por supuesto, Estados Unidos ya se adelantó y anunció la puesta en operación -nuevamente- del bono a 20 años como parte de estrategia para fondear las necesidades de liquidez que permitan respaldar los programas de apoyo económico ante la pandemia del COVID-19. Ayer miércoles se colocaron US$ 20,000 millones, siendo la primera emisión para este plazo desde 1986. El instrumento observó una tasa de rendimiento en 1.220% y buena demanda, con un ratio de cobertura de 2.53x distribuida de la siguiente manera: distribuidores primarios (24.6%), compradores directos (14.7%) y compradores indirectos (60.7%). En este sentido, los Treasuries promedian presiones de 3pb en el mes, aunque este ajuste alcanza hasta +7pb y +15pb en los instrumentos de 10 y 30 años, respectivamente. Con ello, el diferencial entre Treasuries de 2 y 30 años se ha elevado a 127pb desde 108pb al cierre de abril, con un máximo desde 2017 a mediados de marzo en 133pb. Esperamos que esta dinámica continúe conforme el mercado continuará absorbiendo estos volúmenes de emisión y en la medida en la que las curvas de contagio y expectativa de recuperación global evolucionen de manera positiva
Inversionistas demandan a México menos requisitos cambiarios.
“El Banco Central Europeo (BCE) lanzó un paquete de medidas sin precedente que relaja los requisitos de capital de los bancos para aliviar el trago de pasar la crisis del coronavirus y evitar que se frene el crédito y la actividad económica. Ello también significa que suaviza los requisitos para evitar que las instituciones financiadoras cierren el grifo del crédito. Este estímulo monetario representa un total de 750 mil millones de euros, que equivale a 7.3% del PIB de la eurozona”, señaló Gustavo Mendoza especialista en financiamiento e infraestructura de la firma legal Santamarina + Steta. Respecto al caso de México, el especialista precisó que “las enérgicas medidas inicialmente adoptadas por Banxico son consistentes con un contexto internacional caracterizado por importantes estímulos fiscales y monetarios, pero pueden no ser suficientes para reactivar la economía en el nivel necesario”.
Y advirtió: si México no se prepara dejará de ser competitivo y quedará relegado dejando de ser atractivo para la inversión tanto extranjera como nacional. “Hay que estar preparados para el siguiente paso que es el reinicio de la actividad económica. Ello significa que si se requiere que se eliminen ciertos requisitos o cambiarlos, hay que hacerlos de inmediato para ser más competitivos y atraer las inversiones para así facilitar la recuperación. Este planteamiento debe también ser desde la perspectiva legal, para crear confianza y certeza jurídica”, puntualizó el especialista.”
En este sentido -concluyó- el gobierno mexicano debería replantear sus grandes proyectos. Analizar a fondo si se cancelan o no o invertir en otros proyectos más rentables y atractivos dadas las nuevas condiciones geopolíticas y del entorno global. Se debe tomar la decisión responsable para beneficio en cumplimiento de las leyes, y del mandato constitucional que tiene el poder ejecutivo.
Precisan banqueros la importancia del diferimiento del pago del capital e intereses.
La banca en México reitera su postura de trabajar en equipo con todos los actores del país, y busca soluciones a los problemas económicos derivados de la contingencia sanitaria por el COVID-19. El programa de diferimiento de pago de capital e intereses se anunció el pasado 26 de marzo y consiste en apoyar a los clientes en diferir sus créditos por cuatro meses y hasta seis meses. Con cifras al corte del 15 de mayo, suman ya 7.9 millones de créditos, que favorece a más de 3.2 millones de créditos para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyME) y personas físicas con actividad empresarial; 2.7 millones de usuarios de tarjeta de crédito; 962 mil créditos de nómina; 606 mil créditos personales; 281 mil hipotecas; y 219 mil créditos automotrices. Además, 25 entidades federativas han aportado garantías por más de 6 mil millones de pesos, para potenciar los recursos disponibles para crédito a las PyME. Las cámaras empresariales podrían sumarse a este esquema y aportar recursos como garantía para impulsar el crédito. Cabe destacar que la colocación de créditos con Nafin y Bancomext, del primero de enero al 15 de mayo, creció un 38% comparado con el mismo periodo del año anterior, que se traduce en 28.6 mil millones de pesos. Al cierre de marzo, el crédito de la banca con el Infonavit aumentó un 30.3% en comparación con el primer trimestre de 2019, para alcanzar un total de 18.2 mil millones de pesos.
Entrega Fundación Lala 60 mil litros gratuitos de leche a personas de situación vulnerable.
Fundación Lala entregó más de 60 mil litros de leche de manera gratuita a diversas instituciones como Bancos de alimentos y Organizaciones que apoyan a personas en situación vulnerable, en cuatro ciudades del norte del país: Tijuana, Mexicali, Ensenada y Culiacán. En estos días, se entregarán más de 50 mil litros de leche en la Ciudad de México y Cancún, sumando más de 200 mil litros de leche otorgados durante el mes de mayo. “Con nuestro proyecto Trayecto de Esperanza, buscamos apoyar a las personas ante la emergencia sanitaria por el COVID-19, a través de la colaboración con diversas instituciones en el país, quienes han visto un aumento importante en las solicitudes de apoyo alimentario. En Fundación Lala, nuestro compromiso de alimentar sueños es más fuerte que nunca”, comentó José Berlanga de la Peña, gerente de Fundación Lala.
Constructores mundiales confían en que antes del fin de año, el sector se recupere.
Interesantes los resultados de la encuesta que realizó Procore, la firma líder mundial especializada en soluciones tecnológicas para la construcción, para conocer cuales son las perspectivas de esta actividad después del COVID-19. Los resultados demuestran que 81% de los encuestados esperan que las condiciones económicas mejoren a finales de este año, mientras que 53% considera que los recursos para desarrollar obras serán menores en 2021, en comparación con lo canalizado en 2019. Otros de los rubros que se consideran en la encuesta de Procore, son que 73% de los líderes de la construcción prevén que las fuentes de financiamiento se contraerán, incluso se estima que tendrán que negociar con los arrendadores para concluir los proyectos. Por otra parte, casi 80% de los encuestados vaticinan que tendrán que usar más tecnología para llevar a cabo sus proyectos de construcción en la región de América del Norte. La encuesta también muestra la confianza de la industria en el momento que vive. De acuerdo con los resultados, la mayoría de las Inmobiliarias espera que haya un repunte económico para finales de 2020 y tienen un aprendizaje positivo y accionable de las prácticas de negocio austeras, además de consideraciones de seguridad para los trabajadores que se les ha obligado implementar durante la pandemia. Las respuestas muestran indicios de cómo las Inmobiliarias y Desarrolladoras se han fortalecido y se han preparado para salir con paso firme de las dificultades actuales.