martes, abril 23, 2024

Llega Santa María del Circo de David Toscana

CIUDAD DE MÉXICO, 3 de marzo (AlmomentoMX).- Santa María del Circo de David Toscana, relata las aventuras de unos fenómenos de circo que, al encontrar un pueblo fantasma, deciden quedarse en él y fundar un nuevo orden.

La novela editada por Penguin Random House, Grupo Editorial, relata las aventuras de unos fenómenos de circo que, al encontrar un pueblo fantasma, deciden quedarse en él y fundar un nuevo orden.

La novela se publicó por primera vez en 1998 y acaba de ser llevada al cine en Brasil con el nombre de Deserto y también ha sido adaptada como montaje teatral.

“Nadie decide ser cirquero. Son cosas que pasan.”

El circo llegó al pueblo. El pueblo está vacío. ¿Qué hacemos con el circo? ¿Qué hacemos con el pueblo? ¿Qué con el enano, el hombre fuerte y la mujer barbuda? ¿Con el mago, el hombre bala, el contorsionista? Compren su boleto, damas y caballeros, niños y niñas, y entren al circo; ese circo que se va al diablo, lo mismo que todos nosotros.

Alegoría del mundo y de la condición humana, Santa María del Circo es la historia de un grupo de cirqueros que, al llegar a un pueblo fantasma, no menos desolado que ellos, tratan de fundar un nuevo orden, de construir sobre lo destruido. Su vida se convierte así en una función interminable en busca de la propia redención.

En ese recorrido se hallan mezclados la tragedia y el humor negro, el dolor y la ironía. En las páginas que relatan ese ir y venir al mismo punto, se pasea, oronda, una idea estremecedora: el mundo es un gran circo, pero sin espectadores.

FRAGMENTO

“Cuando don Alejo presentó por primera vez el acto de Barbarela aprendió que ni siquiera en el circo se permitía jugar con las creencias de la gente. El acto consistía precisamente en una crucifixión, con algo de melodrama y recursos de teatro; y aunque se tomaron el cuidado de no utilizar palabras como Crista o Jesucrista o cosas por el estilo, y en vez de soldados romanos utilizaban federales, y los ladrones de las cruces de al lado eran dos Cabriolé, haciéndola de Chucho el Roto y Emiliano Zapata, y en vez de un INRI sobre la cruz colocaron un anuncio de la Cerveza Victoria, la gente lo consideró una parodia de mal gusto, y, de manera similar a aquel Viernes Santo, comenzaron los abucheos, arrojaron objetos y alguien terminó por prenderle lumbre a las gradas. La cosa no pasó a mayores porque el fuego no se extendió, y de los objetos arrojados sólo tuvo consecuencias una piedra que golpeó a un Cabriolé en la genitalia de manera tan certera y vigorosa, que pasaron meses antes de que el miembro recuperara sus facultades eréctiles. Los hermanos Mantecón se lamentaron del dinero desperdiciado en el mecanismo, diseñado para simular, en un acto escapista, la ascensión al cielo de Barbarela, y en el espectáculo de rayos y truenos que antecedía la entrada de Hércules para expresar: ‘Verdaderamente era la madre del circo’. Sólo los músicos de la Orquesta Festival se mantuvieron firmes como capitán de barco que se hunde y, mientras la gente abandonaba la carpa con prisa, hicieron sonar sus trompetas apocalípticas.”

David Toscana ha publicado Estación Tula, Lontananza, Duelo por Miguel Pruneda, Santa María del Circo, Los puentes de Königsberg (Alfaguara, 2009), El último lector (Alfaguara, 2010), La ciudad que el diablo se llevó (Alfaguara, 2012), El ejército iluminado (Alfaguara, 2013) y Evangelia (Alfaguara, 2016). Formó parte del International Writers Program de la Universidad de Iowa y del Berliner Künstlerprogramm. Ha sido ganador de los premios José María Arguedas, Antonin Artaud, Colima y José Fuentes Mares. Su obra ha sido publicada en quince idiomas.

AM.MX/fm

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