Teresa Gil
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El PAN y el tiempo de las torres. La presidenta Sheinbaum mencionó el Cártel Inmobiliario. pero muchos lo hemos sufrido directamente y más en aquel tiempo en el que Jorge Romero Herrera gobernó la alcaldía Benito Juárez, antes con el nombre de delegación. Fue del primero de octubre de 2012 a fines de septiembre de 2015. Aparte de lo que trasciende en público y directamente, del Partido Acción Nacional (PAN), hay que sufrirlo a diario, en uno de los pocos lugares donde gobierna en la Ciudad de México, la alcaldía mencionada. Quien ha vivido por más de 40 años en ese espacio, ha visto transcurrir todo tipo de situaciones, pero la etapa abrumadora de la construcción de torres, fue un desafío para ciertos sectores. Ya lo he mencionado pero hay recordar que solo en un espacio de dos breves calles encontradas, están construidos una enorme torre que está en Avenida Revolución y Holbein y siete condominios. A la mitad de una de esas callecitas que desemboca en Patriotismo, se construye otro y enfrente hay uno, enorme. O sea, solo en ese espacio, que se recorre en menos de diez minutos, hay nueve condominios y una torre, en su mayor parte vacía. Eso da una idea abrumadora de las múltiples construcciones que ha hecho el panismo en esa demarcación.
HA HABIDO APARTE, TODA UNA ALTERACIÓN DE LOS USOS CITADINOS
Lo anterior es un ejemplo no solo de la profusión de construcciones, aparte de las muchas torres, a lo que se añade la forma de construcción, las agresiones diarias al habitante ya establecido, el uso de recursos como calles cerradas y manejo de máquinas pesadas en la madrugada. Y la afectación de otras viviendas como ocurrió con las de mi condominio por las terribles explosiones y movilizaciones de la construcción y el polvo, el ruido y el envío de insectos venenosos. Ante esa visión está el reflejo de la alcaldía y su gobierno, de cada colonia, no solo por las muchas construcciones, sino por la contaminación de parques por las casetas de antojitos o taquerías (que pagan a la alcaldía) y la instalación en banquetas de una serie de cocinetas y comercios que impiden la circulación. Ver la banqueta trasera hacia Revolución, de Soriana Mixcoac.
EL PANISMO CAMBIÓ CON EL TIEMPO Y SE CONVULSIONÓ
No se sabe si será el tiempo o las personas, los que cambian. Pero aquel panismo que traté en mi infancia en Cajeme, no tiene nada que ver con el actual. Y de ese panismo sonorense, mis vecinos la familia Amaya, salieron líderes de partido. Amistad, gentileza respeto, y una visión de la pobreza para dar apoyo y solidaridad, fue lo que recibí de ellos. Vecinos por largos años, ellos, una familia de agricultores y la mía una familia de trabajadores que cuidaba la Junta de agua, se hermanaban en los años y en la generosidad de vecinos en el préstamo de libros, la renovación permanente de los tomos de El amigo de los niños y la llegada a jugar de Carmelita la Muchi, que siempre con discreción y gentileza, me llevaba galletas u otra golosina. Cuando hacían una fiesta en el campo que tenían en el Valle del Yaqui me llevaban con ellos en sus carros y me trataban allá, como a todos los demás niños, aunque éstos fueran de familias ricas. Carmelita murió a la temprana edad de 14 años.
EL PANISMO EN SONORA, SU CAMBIO Y LA ALCALDÍA BENITO JUÁREZ
Aquel panismo todavía lo vi en Hermosillo, en personas adultas que se quejaban y criticaban delante de la reportera joven que era yo y hablaban de los pleitos que tenían con el gobierno local y estatal del PRI. El cambio lo fui viendo cuando salí de ese estado y más en años recientes cuando ganó la gubernatura Guillermo Padrés. Para muchos ese triunfo tuvo mucho que ver con el terrible accidente de los niños de la guardería ABC, con señalamientos de culpa tanto para los priístas como para los panistas parientes de Márgara Zavala. Pero más para acá, ya en función el tema de las concertacesiones, se hablaba mucho de la relación del prŕiśta Manlio Fabifo Beltrones, ex dirigente del PRI, con el gobernador panista Padrés. Hay libros que los señalan. Hoy empezaremos a ver el panismo que nos traerá un controvertido Jorge Romero Herrera. Yo recordaré a Muchi, con dos versos de Juan de Dios Peza, que le gustaban: Fusiles y muñecas:
Juan y Margot, dos ángeles hermanos
que embellecen mi hogar con sus cariños,
se entretienen con juegos tan humanos,
que parecen personas desde niños.
Mientras Juan de tres años es soldado
y monta en una caña endeble y hueca,
busca Margot con labios de granado,
los labios de cartón de su muñeca.
