CHENALHÓ, CHIAPAS, 6 de diciembre (AlmomentoMX).- La mañana de este miércoles fueron liberados los tres delegados de Protección Civil de Chiapas retenidos por tzotziles en la región de Chenalhó, en Los Altos.
Autoridades y tzotziles acordaron mantener en el lugar una comisión permanente de elementos de la Cruz Roja, Protección Civil y de Derechos Humanos estatal, porque, advirtieron, que no se comprometen con la seguridad de los que transiten por la zona.
Tzotziles de Chenalhó retuvieron a tres delegados de Protección Civil en el crucero Las Limas, de la carretera que comunica a Chenalhó con el municipio de Chalchihuitán, en la zona Los Altos de Chiapas.
Los funcionarios fueron retenidos cuando regresaban de entregar víveres y de presenciar la firma de acuerdo para levantar el bloqueo que los tzotziles de Chenalhó mantienen desde hace 15 días porque no reconocen el derecho de tierras de los comuneros de Chalchihuitán.
Cuando el personal de Protección Civil pretendía retirar las piedras y ramas, que fueron colocadas por los indígenas, fueron retenidos y se les impidió avanzar.
El conflicto por tierras, que se originó hace 45 años, entre tzotziles de Chenalhó y comuneros de Chalchihuitán provocó que cinco mil pobladores fueran desplazados de por lo menos 30 comunidades desde el pasado 18 de octubre.
Por otra parte, se dio a conocer que será el 15 de diciembre cuando el Tribunal Unitario Agrario emita la resolución sobre el juicio por el conflicto de límites territoriales entre los municipios de Chenalhó y Chalchihuitán, así lo anunció el obispo, Felipe Arizmendi Esquivel.
De acuerdo con AquíNoticias, el obispo aclaró que dicha información se la dio a conocer el secretario de gobierno, Juan Carlos Gómez. En conferencia dominical, expuso que revisarán las medidas que determine el órgano.
“Pero vamos a ver cómo viene, porque sí es solamente respetar los límites del río, eso ya trae sus consecuencias, porque hay gente que está viviendo en otra parte que históricamente dicen no le corresponde, y eso tiene que resolverlo (ni la parroquia, ni la iglesia, ni el obispo) sino el Tribunal”, según información retomada de El Universal.
Arizmendi Esquivel dijo estar en espera de que el enfrentamiento entre los tzotziles, “no llegue a problemas mayores”, es decir, con asesinatos, “porque hasta el momento han sido solamente medidas de meter temor a los demás y de querer recuperar lo que consideran sus propios derechos”.
Lo anterior, ya que “las pasiones desatadas pueden llegar a consecuencias peores, y por eso nuestra urgencia a nivel federal como estatal es que efectivamente se llegue a las soluciones más de fondo”.
En tanto, consideró que la solución del conflicto no sólo debe quedar en manos de las autoridades federales, “sino escuchando a las comunidades, porque fácilmente desde la Ciudad de México se pude dar un documento que en vez de arreglar las cosas, las pueda complicar más”.
Por esto, espera que el fallo “sea una decisión sabia, ampliamente meditada, consultada, consensuada, porque si se llega a un cierto consenso entre los dos pueblos, el problema va seguir adelante”.
También agradeció la respuesta de la sociedad civil, de la Iglesia católica del estado, y hasta de un obispo de Michoacán, por haberse sumado a mandar ayuda humanitaria para los más de 5 mil desplazados de Chalchihuitán y los más de mil de Chenalhó.
Sin embargo, habitantes de San Pablo Chalchihután dieron a conocer que no existen avances para la solución del conflicto agrario que existe con el municipio Vecino de San Pedro Chenalhó y ha dejado a un grupo de familias desplazadas en las montañas de la Zona Altos de Chiapas.
Domingo Díaz Pérez, integrante de la Comisión de la Asamblea General del municipio de San Pablo Chalchihuitán, recordó que desde el pasado 14 de noviembre fueron secuestrados por un grupo paramilitar fuertemente armado.
Lamentó que la llegada de las fuerzas armadas no ha sido para solucionar el conflicto, los militares están en la cabecera municipal resguardando la presidencia municipal, cuando el conflicto está en la zona limítrofe, en las brechas que han abierto los pedranos.
Lo mismo ocurrió con la ayuda enviada por la sociedad civil y los servicios de salud, que de manera momentánea aliviaron ciertas carencias, pero no ha sido una solución.
Por lo que el vocero desmintió la versión del gobernador Manuel Velasco Coello y del secretario de gobierno Juan Carlos Gómez Aranda, quienes han dicho que existen avances en el caso, cuando la realidad es totalmente contraria.
La intimidación a balazos y con bombas de parte de los habitantes de Chenalhó no se ha detenido hasta el momento.
“Desde el 15 de mayo del 2014 se ha intensificado el conflicto, y desde ese tiempo el grupo armado ya tenía presencia, situación que éste 2017 se agravó, pues el grupo paramilitar baleó las casas, realizó saqueos, asesino todo el ganado y animales de traspatio, situación que llevó a las familiar a dejar su casa y huir a las montañas hasta donde éste momento permanecen.
En este escenario, los habitantes de San Pablo Chalchihuitán adelantaron que podrían accionar de otra manera ante la actitud irresponsable del gobernador, lo que podría derivar en otro genocidio indígena.
AM.MX/fm