Andy S. K. Brown
No son sólo 11 guardias nacionales; son cientos
Confusión de Sheinbaum provoca desasosiego
Tras la Megafarmacia habrá 15 mil más vacías
Generalizar no es bueno, nos decían en casa cuando fuimos niños.
Tampoco se trata de decir que toditita la Guardia Nacional está podrida, pero no aceptar que, como todo lo que emprende la 4T, fue integrada al troche y moche, sin verdaderos controles de confianza y prácticamente como leva al interior de los cuarteles de las Fuerzas Armadas es pecar de extrema ingenuidad… por decir lo menos.
Y es que frente a la denuncia en contra de 11 elementos de la GN capturados in fraganti mientras huachicoleaban ductos de combustible bombeado desde la refinería de Salamanca son nada frente a los 133 mil elementos que conforman ese cuerpo policiaco militarizado es una excusa poco creíble, porque no son 11, son cientos.
En redes sociales se han viralizado decenas de videos en los que se observa a elementos de la GN robando artículos en supermercados y en tiendas de conveniencia, aun en aquellos lugares a los que son destacados para auxiliar a la población en casos de desastre.
En caminos y carreteras es todavía peor, pues con cualquier pretexto detienen a los conductores de vehículos, les inventan supuestas infracciones y terminan exigiendo la clásica “mordida”.
Eso para no mencionar las muchas ocasiones en las que se ha evidenciado como elementos de esos destacamentos sirven de “pantalla” a los criminales o incluso participan en delitos de alto impacto.
En esas manos estamos, por más que los defienda Omar García, con la máscara de El Batman sobre su testa.
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Cuando la izquierda política cambia de postura y se derechiza lo único que consigue es que la población desconfíe de sus verdaderos objetivos.
Es el caso de la presidente formal que, asumiéndose como izquierdista –lo que no es real del todo– califica como derechistas y condena a todos los demás que piensan y actúan en contraposición a sus deseos y ambiciones, ya sean éstos personales o facciosos.
Apenas señaló que la CNTE coincide con la derecha, tras conocerse que los profesores disidentes anunciaron que entre sus planes está el boicotear la simulación de elección judicial.
Esa mención le provocó ronchas a doña Claudia, se alarmó y en su cabeza fría –o en la muy caliente de sus asesores– quizá pensó ¿qué cuentas le entregaría a AMLO si los manifestantes llevaban a cabo su advertencia?
La solución simplona fue calificarlos de coincidir con la derecha, lo que tampoco es real del todo, pues la oposición al bodrio proviene de la ciudadanía pensante, la que siempre se solidariza con ideas de progreso social, igualdad y cambio, mientras que la derecha se caracteriza por un enfoque de control absoluto, como el que se le ocurrió poner en marcha a la 4T.
La señora presidente está ideológicamente confundida. Si alguna vez verdaderamente lo fue –gritar en asambleas y formar filas en marchas universitarias no entra en la clasificación–, hoy es más reaccionaria que cualquier priísta en la época dorada del tricolor.
Al menos ni el PRI, como tampoco el PAN, llevaron a cabo un monumental fraude a la voluntad popular como el que ella ya lleva a cabo y que tendrá su punto culminante el próximo domingo, cuando además habrá focos de represión, como en las más rancios regímenes de derecha, luego de la presidente del INE, Guadalupe Taddei, también anunciara que las “mesas de seguridad” de los estados ya están preparándose para actuar donde haya boicots a la farsa judicial.
Y todo eso provoca desasosiego.
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De los autores del fracasado Gas del Bienestar… del Chocolate del Bienestar que contiene azúcar, “pero poquita” … de la Megafarmacia del Bienestar con sus anaqueles vacíos… llegarán pronto ¡las Farmacias del Bienestar!
Todavía no pueden surtir medicamentos e insumos quirúrgicos a las clínicas y hospitales del destartalado sector público y ahora se aventuran a llevar a cabo ¡otro fracaso!
Huele a negocio.
¿Para quién?
No nos vayan a salir que es uno más de Andy López y su Cártel Tabasco Nueva Generación.
Son capaces…
@AndySKBrown1
