Por José Cruz Delgado
*SE IMPUSO EL “DEDO DE ALFREDO RAMÍREZ.
*YARABÍ ÁVILA AHIJADA POLÍTICA DE CASTILLO CERVANTES Y SALVADOR JARA.
No hubo ninguna sorpresa en la designación de Yarabí Ávila González como rectora de la Universidad Michoacana, fue un secreto a voces que era la favorita del gobernador morenista Alfredo Ramírez Bedolla para ocupar el cargo y finalmente prevaleció el “dedazo” del mandatario, pues todo mundo sabe que la desprestigiada comisión de rectoría integrada por ex rectores sigue las indicaciones del gobernante en turno.
No hay michoacana o michoacano que no recuerde al tristemente célebre Alfredo Castillo Cervantes, ex comisionado para la seguridad y el desarrollo integral del estado de Michoacán, quien fue dotado de poderes plenipotenciarios por parte del entonces presidente Enrique Peña Nieto, tan fue así que impuso al nefasto ex rector Salvador Jara Guerrero como gobernador del estado, ambos padrinos políticos de la ahora rectora, así como de la diputada Daniela de los Santos y del legislador Marco Polo Aguirre Chávez quienes se volvieron sus incondicionales de quién fungiera como Virrey y fuera duramente criticado por los partidos políticos por su nula actuación.
Pero además, Castillo Cervantes fue un enemigo de los medios de comunicación que lo criticaban su actuar e intentó controlar la industria informativa cancelándoles vía el gobierno estatal los convenios de trabajo o, como lo hizo con Cadena Rasa, incidiendo en las líneas editoriales así como en quitar y poner periodistas incómodos.
Ávila González, por cierto, ex priista y hoy morenista, se desempeñaba como secretaria de educación en el estado y renunció al cargo para “competir” por la rectoría, pero todo mundo sabía que fue impulsada por el morenista Ramirez Bedolla.
Yarabí Ávila González llegó a la diputación local por primera vez gracias a Castillo Cervantes y Jara Guerrero, quien prácticamente era el gobernador, pues Jara Guerrero era simplemente su empleado.
Siendo diputada traicionó al PRI y se unió al partido Morena. Ya electo gobernador Ramirez Bedolla la designó titular de educación para pagarle su tración, no sin antes mencionar que ambos fueron compañeros en el congreso local.
Mucho tuvo que ver también el ex rector Salvador Jara Guerrero, que como les dije, después fue gobernador por imposición del Virrey Castillo, pues se llevó con él a Yarabí y la hizo diputada local, desde entonces su carrera política fue en ascenso, a tal grado que ahora es la máxima autoridad universitaria al concretarse una vez más la imposición. Seguramente los altos cargos estarán en manos de jaristas y castillistas.
O sea, la iglesia en manos de Lutero.
