Por: José Cruz Delgado
De acuerdo con Ceonline, el presidente municipal de Morelia, el morenista Raúl Morón Orozco, es el noveno de los peores alcalde del país, y es que se desempeño ha dejado mucho que desear, no sólo fue reprobado por una casa encuestadora, sino por los propios morelianos que aseguran estaban mejor con Alfonso Martínez Alcázar, y miren que ha sido de lo peorcito que ha tenido la capital michoacana y no hay mejor encuesta que la opinión de la gente que supuestamente gobierna el integrante de la 4 Transformación.
Morón Orozco, fue reprobado por los morelianos en materia de seguridad y aún tiene el cinismo de decir que ha logrado una estrategia de proximidad y eficiencia en la operación de elementos de Seguridad Pública.
¿Cuál estrategia?
Si la tuviera no hubiera acudido al gobierno federal a pedirle apoyo a Lázaro Cárdenas Batel y a Alfonso Durazo Montaño, y si recordamos, fue en el gobierno de Lázaro Cárdenas Batel cuando más se disparó la delincuencia.
A buen árbol se arrima.
Hay que recordar que la capital michoacana es la tercera ciudad más peligrosa de Michoacán, solo después de Uruapan y Zamora.
Cuando empezaron a aparecer ejecutados y descuartizados minimizó los hechos y dijo que en Morelia no había delincuencia organizada, después tuvo que retractarse y aceptar que sí había y pensó que con la llegada de los turistas (Guardia Nacional) su problema se iba a resolver, que ella haría su chamba pero se equivocó, al contrario, la inseguridad aumentó.
Sus encargados de la seguridad, al igual que él, se dedican solo a mentir, a declarar barbaridades pero su ineficacia ha llegado a los límites, a tal grado que los ciudadanos dicen que estaban mejor con Poncho Martínez, que Morón salió peor que él y fue reprobado en gobernanza.
Morón, al igual que Andrés Manuel López Obrador juegan con el tema de la seguridad, el segundo miente cuando dice que tiene otros datos, y el primero afirma que estamos bien en ese tema, cuando él mismo ha dicho que siempre ha habido inseguridad, lo que indica que le vale gorro la ola de violencia que azota a Morelia, y mientras que los morelianos se “jodan”.
La capital michoacana no puede estar en manos del hampa, debe ser combatida con todo pero parece que sigue los pasos del señor “Presidente”, ah pero su policía salió buena para reprimir a gente indefensa, para golpear a mujeres y ancianos de la tercera edad, como ocurrió hace unos días cuando un grupo de gente de Jesús del Monte tomaron el Palacio Municipal, ahí sí hubo respuesta inmediata y en exceso ¿Por qué aplica esa fuerza contra los delincuentes?
Y no se puede culpar a la policía que actuó de manera gorilesca contra esa gente indefensa, el responsable directo fue él. Mientras que la Comisión Estatal de Derechos Humanos que preside Víctor Serrato guardó un silencio absoluto, no reprobó los hechos.
¿Por qué? ¿Acaso hay complicidad?
El 15 de agosto del 2019, en este mismo espacio dimos a conocer un caso de corrupción en la administración de Morón Orozco que fue ventilado por el diario La Voz de Michoacán y se quedó callado, habla de transparencia y honestidad, pero en los hechos es peor que los otros.
¿Así pues, con qué calidad moral Raúl Morón Orozco habla de honestidad?
¿Esa es la 4Transformación de la honestidad que tanto cacarean?
Lo que debe hacer el alcalde es sentarse a dialogar con el gobierno estatal y poner el tema de la inseguridad sobre la mesa y presentarle el plan de trabajo de la Policía Municipal de inmediato para que juntos tomen las acciones pertinentes en ese rubro porque es una demanda generalizada de los morelianos y, sobre todo, dejar de lado los intereses personales, ya sean políticos o partidistas.
Señor presidente municipal, la seguridad no viste colores, ya deje de lado los partidos y coordínese, la gente quiere seguridad, no falsas palabras ni poses demagógicas.
Por una vez en su vida haga algo por la gente y deje de andar de llorón ante el gobierno federal y asuma su responsabilidad que en mala hora le confirieron los morelianos.