Por José Cruz Delgado
*Raúl Morón no puede con Morelia y quiere resolver problemas de otros municipios
*La pandilla de Ochoa Reza se apodera del CDE del PRI
Raúl Morón Orozco, el ineficiente presidente municipal de Morelia, no puede resolver los problemas y quiere solucionar los de otros municipios, no cabe duda, es candil de la calle en y oscuridad de su casa.
Y es que anda en plena campaña electoral buscando la candidatura de Morena al gobierno de Michoacán, para él no hubo tiempos, al igual que el senador Cristóbal Arias Solís, desde que asumieron el cargo les llegó el amor por los michoacanos y de inmediato dieron a conocer sus aspiraciones y desde entonces se han dedicado a recorrer el estado tratando de convencer al electorado en de que sin la mejor opción, eso sí, gastando dinero al por mayor.
Bueno, pues Morón Orozco visitó el fin de semana pasado Uruapan, Paracho, Ario de Rosales y Santa Clara del Cobre, donde se supuestamente los habitantes le brindaron su apoyo luego de escuchar sus necesidades, como si la capital michoacana no las tuviera.
Y precisamente, uno de los graves problemas es la inseguridad, los baches y los feminicidios, pero parece no importarle ya que anda inspirado y obsesionado en ser gobernador.
Como se siente apóstol del Mesías Andrés Manuel López Obrador, pues trata de engañar a los incautos con el petate del muerto, diciendo que quiere consolidar un proyecto obradorista, como si fuera tan eficaz.
En lugar de buscar la manera de resolver esa problemática, dedica su tiempo a su precampaña y los morelianos de que se jodan.
Raúl Morón Orozco no es digno de nada, ni siquiera de ser alcalde, por su mala administración.
LA PANDILLA DE OCHOA REZA SE APODERA DEL CDE DEL PRI…. Como en los pasados comicios, la pandilla del nefasto Enrique Ochoa Reza, integrada por Chon Orihuela, Víctor Manuel Tinoco Rubí, el tristemente célebre Salvador Jara Guerrero y Agustín Trujillo Iñiguez, se han apoderado del CDE del Partido Revolucionario Institucional, haciendo a un lado al ineficiente Jesús Hernández Peña, quien fue impuesto por el CEN priista como presidente a sabiendas que carecía de liderazgo, y a esta pandilla hay que agregarle el nombre de Agustín Trujillo Iñiguez, quién es el secretario técnico quienes están cortados con la misma tijera.
Fue un plan muy bien planeado, pues sabían que iba a ser manipulado por esta cuarteta que tanto han dañado al tricolor, y que además fueron los responsables de la contundente derrota al imponer a su antojo candidatos sin arraigo, en una palabra, a sus cuates. qué concluyó con unos resultados desastrosos.
Todo indica que van por el mismo camino del precipicio, de la deshonrra y la derrota, porque por encima de la militancia están sus intereses personales. De nuevo van a agandallar las candidaturas en complicidad con Alejandro Moreno Cárdenas, tal pareciera que quieren entregar la gubernatura a los morenistas.
Con estos negros personajes nada bueno le espera al PRI michoacano, más que división y rebeliones, como sucedió en el 2018. Dónde está cuarteta impuso candidatos perdieron, y dónde los priistas no se dejaron, ganaron.
En ese año, se apoderaron de la Comisión de Procesos Internos, hoy, todo indica que será igual, pues Moreno Cárdenas tiene facultades plenipotenciarias para designar candidatos a su antojo, claro, con el apoyo de Tinoco Rubí, Chon Orihuela, Ochoa Reza, Salvador Jara y desde luego de Agustín Trujillo Iñiguez.
Será que por órdenes del CEN quieren que el tricolor pierda el registro?
De nuevo quieren tratar a los priistas como niños, pero a poco creen que se van a dejar que estos sujetos vuelvan a imponer sus condiciones y cometan las mismas arbitrariedades.
Bueno, si la militancia lo permiten allá ellos, en el pecado llevarán la penitencia.