viernes, marzo 29, 2024

Hernán Giraldo Serna el narcotraficante que violó a más de 200 niñas

CIUDAD DE MÉXICO, 9 de abril (AlmomentoMX).- El ex jefe paramilitar Hernán Giraldo Serna, conocido como “El Taladro” realizó confesiones sobre sus crímenes que dejaron helados a más de uno. El hombre actualmente se encuentra preso en Estados Unidos.

Según medios de Colombia, Giraldo abusó de unas 200 niñas menores de 14 años en un período de 15 a 20 años.

El jefe criminal controlaba la región del Magdalena, al norte de Colombia, durante la guerra entre los narcoparamilitares y guerrillas como las FARC.

Presuntamente las adolescentes eran entregadas por los padres tanto por temor como por beneficios económicos.

El hombre prefería a las niñas “de fisionomía blanca, menores de 14 años de edad, vírgenes y anchas de caderas”.

Muchas quedaron embarazadas y pocas escaparon de su poder.

Las que intentaron tener relaciones con otros hombres fueron asesinadas, las niñas fueron sometidas a violaciones y eran obligadas a trabajar para la organización criminal.

Giraldo reconoció a 38 hijos, pero investigadores tienen evidencia de que se trataría de unos 70. Algunos de ellos hicieron parte de su organización criminal ya que Giraldo soñaba con tener herederos para su reino

Giraldo se entregó a las autoridades colombianas en 2006 durante el proceso de desmovilización de paramilitares que hizo el gobierno de Álvaro Uribe.

Fue extraditado a Estados Unidos por el delito de narcotráfico y se le condenó a 16 años de prisión, además deberá enfrentar a la justicia colombiana por los abusos sexuales cuando retorne a su país.

El caso fue revelado gracias al trabajo de Norma Vera Salazar, magíster en derechos humanos y secretaria de interior del Magdalena.

Su investigación, ‘La violencia sexual como arma de guerra, en el contexto del accionar del Frente Resistencia Tayrona’, es parte de sus tesis de maestría y la realizó con su madre, Ana Salazar.

La investigadora Vera afirma que escoger un perfil de víctimas y obligarlas a pertenecer a la organización criminal conllevó a que la incidencia del agresor sobrepasara lo militar y propiciara la creación de “estructuras sociales de arraigo zonal”.

AM.MX/fm

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