La competición en el sector de los procesadores es muy compleja. Qualcomm lleva liderando desde hace varios años, MediaTek está empezando a recuperarse tras una larga mala racha y Apple ha entrado con fuerza con sus productos propios. Algo similar ha tratado de hacer Samsung con Exynos, su propia división, pero hasta ahora solo se ha traducido en pérdidas y críticas por su rendimiento inferior a Qualcomm… pese al alto precio de sus productos.
La crisis interna de Exynos
Samsung LSI, la marca detrás del diseño y el desarrollo de algunos de los procesadores y de otros componentes que muestran los móviles de la marca surcoreana, está mostrando claros signos de debilidad frente a sus competidores. El mal rendimiento del Exynos 2500 obligó a la empresa a utilizar chips de rivales en algunos buques insignia de la firma, rompiendo la estrategia de desarrollo interno de la misma. Los procesadores anteriores, además, ya habían decepcionado enormemente a los usuarios, sobre todo por los desastrosos resultados en los benchmarks y en juegos exigentes como las slots. Como resultado, las pérdidas han alcanzado cifras millonarias, por lo que ahora están teniendo que reestructurar la unidad de semiconductores. La presión interna y externa está siendo brutal, por lo que será difícil recuperar la rentabilidad y reforzar la competitividad de la marca.
La firma surcoreana está contemplando algunas medidas drásticas, como fusionar la fabricación de chips con la división de móviles, con la idea de crear sinergias y optimizar la integración de hardware y software. Sin embargo, estas propuestas aún están discutiéndose y la incertidumbre sobre el futuro inmediato de Exynos persiste.
El desarrollo del Exynos 2600 puede ser la última opción de vida para Samsung LSI tal y como se conoce. Para ello, tendrá que dar un buen rendimiento a los que quieren saber como se juega blackjack online, que también necesitan una potencia muy por encima de la media, a la par que una buena eficiencia térmica y de batería, algo en lo que han fallado los procesadores surcoreanos en los últimos tiempos. El procesador usará tecnología de 2 nanómetros, y su éxito dependerá de muchos factores.
Un futuro muy complejo
El mercado de los semiconductores es cada vez más exigente, y más si se tiene en cuenta lo crítica que va a ser esta industria en los próximos años. Qualcomm y MediaTek han conseguido establecerse como marcas que saben combinar alto rendimiento y eficiencia, a la par que se espera que Intel vuelva a levantar el vuelo más pronto que tarde. Al mismo tiempo, los surcoreanos ven cómo Google se aleja y sus Tensor podrían empezar a fabricarlos otras compañías. El Exynos 2600 tiene que ser un buen golpe encima de la mesa y la apuesta por los 2 nanómetros un éxito si el gigante tecnológico quiere hacer rentable esta parte de su compañía. Si no, las pérdidas millonarias no cesarán… y tendrán que pasar por el aro de comprar todos sus procesadores a otros.