Bellocchio imaginó un gran fresco barroco en el que se mezclan lo íntimo y lo político, lo dramático y lo imaginario: las caricaturas que cobran vida ante los ojos del Papa Pío IX (Paolo Pierobon)
Copia y pega esta URL en tu sitio WordPress para incrustarlo
Copia y pega este código en tu sitio para incrustarlo