Alberto MONTOYA
La primera impresión fue que Andrés Manuel López Obrador traicionó de nuevo a Marcelo Ebrard Casaubon al no darle la candidatura presidencial, como en 2012, y que hasta su muchacho, Mario Delgado Carrillo, le dio una puñalada trapera.
Pero del anuncio que haga hoy el llamado Carnal Marcelo se sabrá si su enojo y frustración son reales o sólo una farsa para quitar puntos al Frente Amplio por México (FAM), integrado por PRI, PAN y PRD, al sumarse a Movimiento Ciudadano (MC) como su candidato.
¿Por qué?
Porque el plan de Andrés Manuel López Obrador es pulverizar, fragmentar el voto lo más que se pueda.
El registro de Eduardo Verástegui y de Hugo Eric Flores y una decena más de candidatos independientes fue promovido desde Palacio Nacional y el acuerdo es conseguirles las firmas equivalentes al 1 por ciento del listado nominal en manos del Instituto Nacional Electortal (INE), necesarias para validarles.
Ebrard Casubon ya no puede hacerlo, porque el plazo para inscribirse venció el 7 de septiembre.
El ex canciller sabe perfectamente que no ganará la elección y que máximo obtendría un 5 o 6 por ciento de los votos, lo que significa que si va a aparecer en la boleta como candidato presidencial como aseguró la semana pasada, cuando abortó su participación en el
proceso de Morena, será con MC, del palero Dante Delgado Rannauro, al servicio de López Obrador, es, necesariamente, con los naranjas porque en el Frente la candidata ya es Xóchitl Gálvez Riuz y es inamovible.
¿Estás enojado, encabronado, decepcionado de Andrés Manuel y quieres que no gane Claudia Sheinbaum Pardo, porque se quedó con la candidatura a la malagueña?
Entonces, Marcelo, tu lugar es en el Frente Amplio.
Pero no como candidato, porque te viste lento -insisto, si es real su molestia- y debiste dejar Morena desde el principio del proceso y habrías tenido mucha oportunidad de ser el abanderado frentista.
De lo contrario, reitero, tu participación sólo servirá para que se mantenga este gobierno de cuarta.
ARROPA EL PRI A XÓCHITL
Xóchitl Gálvez conoció el viernes lo que significa ser priista.
En la sede nacional del tricolor, gobernadores, ex gobernadores, diputados, senadores y más se entregaron a la que será candidata presidencial. El Partido Revolucionario Institucional (PRI) se rindió en pleno a la inminente candidata presidencial de la coalición.
Ante los diversos sectores que le integran, la originaria de Hidalgo prometió que, si la apoyan, no los defraudará y acabará con la corrupción y favoritismos que existen en el actual gobierno.
–¡Presidenta!, ¡Presidenta!, le gritaban decenas, cientos, miles de seguidores reunidos en el auditorio de la sede nacional del partido.
El PRI hizo suya a la senadora del Partido Acción Nacional (PAN) que no está afiliada a ningún instituto político, pero puede trabajar con cualquiera por su facilidad para desenvolverse
.
HARFUCH VA POR LA CDMX
En la entrega de Día Hábil del viernes 8 de septiembre le dije que
Omar García Harfuch estaba entre los candidatos al gobierno de la Ciudad de México por parte de Morena.
Al otro día se separó de la Secretaría de Seguridad capitalina, donde era el jefe, para irse, dice, con Claudia Sheinbaum a la campaña.
Ya le había dicho que García Harfuch sería el abanderado si y sólo si la oposición amenazaba con arrebatar al oficialismo la capital del país, luego de la paliza que en 2021 le propinó al arrebatarle nueve de dieciséis alcaldías y darle un susto en el Congreso local.
Y así sucederá.
La historia de personajes carismáticos y atractivos para las mujeres suelen dar resultado.
Ahí están, por ejemplo, Enrique Peña Nieto y Miguel Ángel Mancera Espinosa.
Y García Harfuch no es la excepción.
Vámonos: Los reporteros consentidos –los paleros- andan con Andrés Manuel en la gira por Colombia y Chile.
Así se gastan el recurso.
Sí, sí son distintos, no son iguales…
Son peores.
albermontmex@
