Por Mouris Salloum George
El gurú de las finanzas, el norteamericano Robert Kiyosaki pronosticó hace poco en una entrevista unas cosas de verdadero impacto refiriéndose a que el dólar y los mercados financieros Estadounidenses que están al borde del colapso debido al aumento de precios de los alimentos, el petróleo y la energía, así como a la inflación generalizada en ese sentido; advirtiendo que el aumento de la inflación es un grave problema que no hace más que empeorar la calidad de vida de los estadounidenses, porque como todos sabemos EE.UU. ya no produce casi nada sólo produce “burbujas”, así que ahora tienen la burbuja en el sector inmobiliario, burbujas de acciones y burbujas de bonos, recordando que cuando Biden sacó a Estados Unidos del oleoducto Keystone los precios del petróleo se fueron a la alza con el afán de sustituirlo con el proyecto Keystone Excel que estaba planeado para enviar crudo de la provincia canadiense de Alberta a refinerías estadounidenses, pero el presidente Joe Biden cerró el proyecto en junio de 2021, esta decisión por parte de la administración Joe Biden fue celebrada por activistas medio ambientales, pero fue fuertemente criticada por expertos economistas y miembros del gobierno canadiense, por eso ahora en medio de esta crisis energética mundial la administración Biden tiene problemas para controlar los precios de la energía y los productos derivados del gas y el petróleo.
El petróleo y gas producen fertilizantes, cuando los fertilizantes dejan de ser baratos los productores del campo aumentan los costos de los alimentos y esto genera inflación que sacudirá sin duda a las clases pobres, medias y ahí es cuando empezarán las protestas y posibles revoluciones.
Pese que a todo eso, tiene bastante lógica y validez en estos momentos que Donald Trump y los Republicanos buscan cualquier excusa para meter más leña al fuego, en cada metedura de pata de la administración Biden.
La inflación en Estados Unidos subió en marzo de 2022 hasta el 8.5% una cifra que no se veía desde hace 40 años concretamente desde Diciembre de 1981, las subidas en los índices de gasolina, alojamiento y alimentación fueron los mayores contribuyentes al incremento de la inflación, la gasolina es la que más duro ha impactado a los ciudadanos de la primera potencia mundial, es por eso que Biden ordenó recientemente la liberación de un millón de barriles de petróleo al día durante los próximos seis meses, una cantidad récord con la que espera frenar el aumento de los precios de la gasolina.
Hoy la población está descontenta, por lo que se derivará en grandes protestas y de momento Donald Trump se frota las manos y el sonriente Joe Biden sufre por encontrar soluciones.