HUIXQUILUCAN, ESTADO DE MÉXICO.- Crisis de salud pública en Huixquilucan afecta a más de mil 200 familias que circundan la Presa “El Capulín” desde hace más de 20 años, señalan habitantes de La Herradura, Parques y Balcones de La Herradura, entre otras zonas urbanas del municipio mexiquense.
Para atender la demanda social el Diputado José Antonio García García, a través de un Punto de Acuerdo que presentó ante el Pleno de la Cámara de Diputados, exigió al Sistema de Aguas de Huixquilucan actuar de manera urgente y obvia resolución en el saneamiento de la cuenca y regresar a la comunidad calidad de vida.
Dio a conocer que el municipio cuenta con más de cuatro mil 500 millones de pesos para el ejercicio 2023 y que de manera irresponsable no han invertido un solo peso para generar acciones y propuestas que contribuyan a solucionar este problema de salud pública.
Respecto al menosprecio de las autoridades municipales para atender una añeja demanda ciudadana de desazolve y saneamiento solicitó la intervención de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y del Sistema de Aguas del Estado de México para solventar limpieza y desinfección de la Presa “El Capulín”.
José Antonio García García preciso que el descuido y abandono de la cuenca, el vaso regulador de aguas pluviales se convirtió en captador de aguas negras que intoxican mantos freáticos y dañan la salud de al menos cinco mil personas que habitan la zona y en ese sentido exigió mayor responsabilidad a la presidencia municipal de Huixquilucan: “no más excusas ni largas al saneamiento de la Presa”.
Ante la evidente emergencia pública que altera la calidad de vida y compromete la salud de los ciudadanos locales se requiere reorganizar los servicios administrativos y una reestructuración en el ejercicio de políticas públicas porque los daños podrían ser irreversibles, señalan habitantes de Huixquilucan.
Al respecto José Antonio García sostuvo que la responsabilidad de reparar el daño ambiental corresponde a la Presidencia Municipal de Huixquilucan con base en el Capítulo Séptimo de la Ley de Aguas Nacionales.
Explicó que en la legislatura se precisa que el control de descargas de aguas residuales, a los cuerpos de agua Federales, es una responsabilidad que deben atender los municipios y que en el caso de “El Capulín” las autoridades municipales han sido omisas para dar una solución integral, sustentable y eficiente pese a las múltiples denuncias vecinales.
Lamentó que la ineptitud de funcionarios municipales dañe severamente las zonas naturales que caracterizan a Huixquilucan y en ese sentido exigió tajante: “No más excusas ni largas al saneamiento de la Presa ´El Capulín´, de Huixquilucan, porque los vecinos de la Herradura y zonas circundantes exigen medidas inmediatas y merecen respuestas favorables; necesitan soluciones, no más pretextos”.
Está claro, dijo, que “no hay voluntad política y por ello me sumo de manera responsable, respetuosa y solidaria a sus demandas y, a través de un Punto de Acuerdo, solicité a las autoridades de CONAGUA, Secretaría de Aguas del Estado de México y del Sistema de Aguas municipal para que actúen inmediatamente en la limpieza, saneamiento y rescate de la Presa ´El Capulín”.
Hace 80 años el gobierno Federal construyó la Presa para evitar inundaciones en el Valle de México, sin embargo, la falta de planeación en materia inmobiliaria y de infraestructura hidráulica provocó que la oquedad se convirtiera en receptora de aguas residuales crudas.
El crecimiento desordenado contribuyó a una crisis de salud pública donde predominan los olores insoportables que producen las aguas negras, situación por demás conocida por los tres niveles de gobierno a los que hoy el diputado de Morena pide se coordinen para finiquitar la contaminación ambiental.
Por último, José Antonio García destacó que la prestación de servicios adecuados de agua y saneamiento es esencial para lograr y cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible, específicamente al objetivo de garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y el saneamiento para todos.