HÉCTOR MOCTEZUMA DE LEÓN
Seis sexenios, incluyendo los dos panistas, llevan estos dos personajes chupando del erario, pero no sólo eso, realizando grandes negocios al amparo del poder. Uno yucateco y el otro sonorense, los dos con una gran influencia al interior del PRI, al grado de que muchos priistas los reconocían como las principales figuras del partido.
Emilio Gamboa y Manlio Fabio Beltrones, se la han pasado de una cámara a otra, siempre como coordinadores de la fracción mayoritaria, la del PRI. Gamboa además ocupó importantes cargos hasta antes de que los panistas sacaran a su partido de Los Pinos. Director del Seguro Social, Secretario de Comunicaciones y Transportes, director general de Lotería Nacional y director general de Fonatur y en su inicio secretario particular del presidente Miguel de la Madrid, cargo que ejerció con una gran influencia en las decisiones presidenciales. ¡¡¡siempre estuvo donde hay!!!.
Beltrones fue gobernador del Estado de Sonora y subsecretario de Gobernación en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, cuando estuvo al frente de la Segob Fernando Gutiérrez Barrios, después brincó de diputado a senador, de senador a diputado, cargo éste último, al que llegó por primera vez en 1982 para perpetuarse como legislador durante más de 20 años. Fue líder del PRI en el sexenio pasado, pero salió por la puerta trasera tras la estrepitosa derrota en las elecciones del 2016.
Ambos son insaciables, vea usted el caso de Gamboa después de haber estado en las posiciones mencionadas, en donde se manejan recursos públicos, en serio, fue coordinador de los diputados y de los senadores priístas hasta el sexenio pasado.
Pero la ambición de yucateco no se quedó ahí, en el sexenio pasado además de manejar a los senadores priístas le pidió a Enrique Peña Nieto, Fonatur, para Héctor Gómez Barraza y la dirección general de Puertos y Marina Mercante Guillermo Ruíz de Teresa, su pareja…en el dominó. Además desde hace más de 10 años maneja al presidente de la Asociación Mexicana de Empresas Farmacúticas, Eduardo Morales Portas, su incodicional, el que firmaba los contratos para la venta de medicinas al sector salud.
Manlio no se queda atrás fue gobernador de Sonora, pastoreó la manada priista en las dos Cámaras, controló por medio de sus hermanos la aduana fronteriza de Tijuana, llevó a Caludia Pavolvich a la gubernatura de del estado norteño e hizo senadores a su yerno y a su hija.
Dos tipos de cuidado que también tienen intereses en las plataformas de Pemex en la Sonda de Campeche. ¡Los Intocables!.
Son auténticos peces gordos, pero gozan su impunidad, posiblemente muy lejos de México en donde se gastan una parte mínima de lo que acá se robaron. “Somos ratas no pendejos” dijo un cínico priista, mientras por la IV todavía andan con que “el pueblo se cansa de tanta pinche transa”, pues no, el pueblo todavía aguanta tanta transa.
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Más que a David León o a Pío López Obrador al que deben investigar es a Manuel Velasco Coello, uno de esos tantos “políticos” que llegan a los puestos de elección popular a base de sobornos y otras maniobras. Que le investiguen cuánto dinero aportó para la campaña de Enrique Peña Nieto que lo hizo gobernador y cuánto para la de Andrés Manuel López Obrador que lo hizo senador. Presume que su abuelo es amigo del presidente, pero su escalón fue otro. “El que no transa no avanza”. Conocí a Manuel Velasco Siles el padre de Velasco Coello, qué diferencia, un hombre decente, de joven cuando su papá-el abuelo de Manuelito- era el gobenador de Chiapas incursionó en las filas de la CNOP juvenil del estado, pero se retiró para ejercer con gran responsabilidad la medicina. Fue el director del Hospital General de la Ciudad de México en donde murió, justo en su consultorio, de un infarto fulminante…Estupidas esas declaraciones del titular de la Profeco Ricardo Sheffield en la mañanera de ayer, dice que el oxigeno se ha encarecido porque irresponsablemente hay consumidores que lo compran y no lo usan. Es por el pánico provocado por López Gatell y su banda, procurador.
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