jueves, abril 25, 2024

CABEZA DE PLAYA: “¿Habrá agua hirviendo suficiente en el Mundo?

Carlos Galguera Roiz

Los europeístas generan gritos saludables, sugerentes, atractivos, para intentar mantener vivo el Proyecto Europeo; pero, aunque este presenta evidentes ventajas, creo llega demasiado tarde para unas ciudadanías, prematuramente quizás, desgastadas…

Bueno, el único plan exitoso para configurar un conglomerado con Unión de Estados y vocación de Patria Común, ocurrió en los EEUU de América, allá por el último tercio del Siglo XVIII, raíz anglófila, generó una sorprendente mística de Gran País, sobre todo después de las anexiones territoriales a costa de México, finales siglo XIX.

Luego, dos Guerras Mundiales por medio, surgió en Europa una cierta fiebre de reconocimiento, concienciación para hacer irrepetibles este tipo de terribles conflictos; así pudo soñarse con la aparición, mediados siglo XX, de la Comunidad Europea, como Potencia de buena dimensión y vocación – respaldos históricos – de liderazgo mundial o ubicación al menos por las cercanías de las Cúpulas…

Aparte de esta Europa incipiente, nació un potente conglomerado de naciones, en torno a Rusia, así se conformó la URSS; su proyecto tenía como gran pegamento el Comunismo, esta poderosa argamasa hizo crisis, no logró funcionar de forma competitiva…; Quedó Rusia, líder mundial destacado en extensión territorial; sus antiguos satélites resultaron flotando en torno a esta implosión que se escenificó con la caída del Muro de Berlín, en 1.989…

Luego no ha habido más intentos de cuajar consorcios reales de Naciones potentes, viables… solo tímidos y vagos amagos. Veamos: Hacer de Latinoamérica una grande y potente confederación de Estados, ha sido uno de los sueños fallidos en ese gran Continente; pugnas localistas mezquinas han impedido armar este rompecabezas, algunas caricaturas resultaron de algunos frustrados intentos, con una jauría de políticos repartiéndose innumerables trozos de botín resultante en estos torpes amagos…

Finalmente, a la cola, muy a la cola del pelotón, habría de considerarse, como un intento de lejanas perspectivas, una Unión de Estados Africanos, pero con una Hipoteca inasumible, demasiada sangre inocente derramada para intentar apenas algún cambio, mínimos logros, para este Gran Continente, Riqueza latente escondida entre conglomerados humanos resistentes y poseedores de características vitales muy valiosas, sin desarrollar, con unas capas de caciquismos insoportablemente lastrantes…

Este es el panorama, a vuela pluma, que yo veo en nuestro mundo de hoy. Así que volviendo a Europa, veo a la CE, como una comunidad de Naciones, inmensa mayoría demasiado pequeñas, encerradas en sí mismas, incapaces de conseguir el impulso suficiente para las Grandes metas como Prosperidad, Progreso Social, enriquecimiento Cultural, avances Científicos y Tecnológicos, Democracia de Calidad, convivencia en Paz y Libertad…

Imposible armar unos Estados Unidos Europeos sin un plan intensivo y profundo, para crear una mentalidad ciudadana libre, altos quilates, poseedora de esa vocación como Patria Común, necesaria para acceder a tamaño reto, compitiendo con los gigantes que copan ahora los Altos Escenarios; Parece tarde para la actual Europa abordar esta dificilísima escalada.

Solo atisbo a entrever, actualizando el viejo grito de la Revolución Francesa: “Imaginación, junto a Inteligencia y Valores, al Poder”, pero como desalojar lo que rige ahora en los Puentes de Mando: “La mediocridad en el Poder”, no hay suficiente agua hirviendo en el Mundo…

Pero, a veces, los milagros pueden suceder, sobre todo después de las Pandemias…

Artículos relacionados