Carlos Galguera Roiz
Bueno, un viejo amigo, desde mis lejanos primeros años de vida en México, a raíz de mi último mensaje “Inmersión…” me envía este comentario generoso, que me dio pie a una respuesta, podría ser una manifestación existencial que quiero compartir contigo, por su efecto justificativo, si fuera necesario…
CARLOS: ME ENCANTÓ “TU TRABAJILLO” COMO LE LLAMAS, QUE PARA MI ES UNA ESTUPENDA Y PROFUNDA REFLEXIÓN SOBRE NUESTRO ENTORNO. ¿NUNCA TE HAS PROPUESTO ESCRIBIR UN LIBRO? CREO QUE TIENES TODO LO QUE SE NECESITA PARA QUE SEA TU LEGADO EN ESTA VIDA. TE FELICITO
Mi réplica:
Amigo, has tocado uno de mis viejos proyectos…; tengo innumerables apuntes pensados para armar relatos con trasfondos muy especiales…, empezando por 1 libro, novela, historia, crónica o como quieras llamarlo…
El caso es que lo he pensado, si es algo que de verdad merezca la pena, lanzarme a esa aventura requiere una fuerte inmersión, alta concentración… 8-10 horas diarias, dedicación absoluta, quizás 1 año entero y , lo más importante, renunciando prácticamente, a vivir…
No se si podría cumplir ese requisito…; gracias por tus ánimos que me comprometen de algún modo y en alguna medida…
Además, imagínate, han pasado por mi vida multitud de personas y personajes, estilos, calidades, originalidades muy variadas…; construir una Historia nueva, creíble, con, entre otros que se me ocurran, tantos ingredientes, pienso sería capaz…
Pero el precio de hacer esta creación, trabajar como una especie de diosecillo que inventa “vidas” y entramados, puede ser tan fascinante como compulsivo, quizás inasumible para mi…
Apasionante si podría ser, pero un poco de locos; si realizara esta inmersión con la suficiente entidad como la que he pensado sería necesario emplear, sería labor un tanto obsesiva, si no lo hiciera así, no merecería la pena este “trabajillo”…
No obstante, veré que puedo hacer para abordar – si en algún momento me decido- este laberinto, no me queda tanto tiempo…
