CIUDAD DE MÉXICO, 16 de agosto (AlmomentoMX).- Todos los niños deberían alegrarse de regresar al colegio, pero en ocasiones no sucede. El Centro de Estudios Psicológicos en la Infancia (CEEPI) detectó que muchos de ellos, y que acuden a su clínica de servicios psicológicos, presentan cuadros de ansiedad, de insomnio y, en menor grado, síntomas de depresión, causado por el regreso a clases. “Después de estar un mes y medio con su familia, el hecho de separarse siempre provocará algún grado de ansiedad y temor. El problema se presenta cuando los niños padecen los síntomas descritos de una forma aguda y persistente o por más de 15 días después del ingreso a clases: aquí es indispensable poner atención porque detrás del miedo de ir a la escuela, puede haber un problema más serio “, explicó la Dra. Claudia Sotelo Arias, directora de CEEPI.
Según el organismo el foco del problema puede derivarse de tres problemas:
– Bullying. Si ha existido un problema de acoso escolar constante, o si el niño no se siente integrado desde el aspecto social a su colegio. Esto se presenta en el 50% de los casos.
– Sobreprotección. Los niños que no han aprendido a tener autonomía y cuando llega el día de ir a la escuela hacen berrinches y se tornan ingobernables, porque existe un miedo irracional a la separación de sus padres. Esto sucede en el 30% de los casos (principalmente en edad de preescolar y los primeros dos años de educación primaria).
– Por problemas de aprendizaje o elección de un colegio no acorde con las habilidades (cognitivas, sociales o emocionales) de los menores. Cuando se ven frustrados constantemente porque su aprovechamiento escolar no es bueno. Sienten frustración, depresión y verán minada su autoestima. Esta causa se presenta en el 20%. (También puede haber acoso escolar por parte de profesores y compañeros de clase cuando se presenta esta situación).
“En cualquier caso es fundamental tomar medidas inmediatas como detectar los escenarios y motivos del acoso escolar, implementar medidas para atenuar la separación con los padres y determinar el origen del bajo rendimiento escolar. En CEEPI estamos especializados en atender estas problemáticas. Ayudamos a los niños y a sus familiares con acompañamientos psicológicos. También aplicamos pruebas que determinan la capacidad intelectual, el grado de inmadurez o los problemas emocionales y tenemos talleres para crear nuevos hábitos de estudio en los niños”, concluyó la Dra. Claudia Sotelo Arias.
AM.MX/fm