Por José Antonio Chávez
Andy López Obrador, hijo del ex Presidente López Obrador, puso en marcha la credencialización de afiliación de sus militantes en el partido propiedad de su padre.
Su llamado fue atendido, no solo por la militancia, sino por los gobernadores que de inmediato se alinearon para registrarse como militantes de Morena.
Desde luego que llamó la atención la presencia del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya para buscar mandar un mensaje con la postal que se tomó, con credencial en mano y abrazando al hijo del ex Presidente.
Paso lo mismo con la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, con sonrisa y todo, también se tomo la postal con Andy. En su estado brotó un nuevo escándalo de inseguridad por el secuestro del empresario petrolero, Luis Carlos Vizcarra en su casa de Playa del Carmen y que ha sido despojado de 360 millones de pesos que lo han obligado hacer vía transferencias. La autoridad no sabe nada.
Qué decir del gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal que también está bajo la lupa del gobierno de Donald Trump por sus señalamientos de estar presuntamente involucrado con carteles de la droga.
López Obrador junior con esta entrada de afiliaciones, busca llegar a los dos millones para mostrar que Morena es un partido del pueblo, aunque el mensaje de afiliar a Rocha Moya y al gobernador de Tamaulipas, es que no cederán a los caprichos de Estados Unidos ante sus acusaciones.
Dicen los que saben que Andy parece que está trazando la misma línea o ruta de la hoy Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuando arrancó el sexenio d López Obrador en 2018 con el proyecto de la candidatura Presidencial.
El hijo de AMLO, de seguir así en el posicionamiento como candidato a Palacio Nacional, puede ser la próxima imposición para las corcholatas en espera, Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal y hasta Adán Augusto, pues para nadie es secreto que así, igualititito fue el proceso de Sheinbaum.
Naturalmente que es muy temprano para pensar que Morena ya comenzó a imponer al heredero de Sheinbaum, pero así comenzó ella y las corcholatas (Monreal, Ebrard y Adán) lo sabían, por eso hoy gozan de cargos otorgados para liderar el Congreso por el saliente Presidente, un contrapeso para Claudia.
EN EL SENADO, ADAN PLACEA A LOS YUNES
Llamó la atención qué en el Senado, donde Andy López anunció que llevaría los módulos de afiliación, el líder de la bancada de Morena, Adán Augusto se placeo por los patios con Miguel Angel Yunes, padre del senador del mismo nombre el mismo que realizó la traición al PAN para pasarse con los morenos y darles el voto que necesitaban para tener la mayoría calificada y votar la reforma la Poder Judicial.
Ellos, como otros más chapulines como el ex gobernador de Oaxaca, el ex priista, Alejandro Murat y más, se han alineado para, orgullosamente vestir la camiseta guinda y afiliarse, de manera oficial a ese partido.
Ese programa de afiliación fue la antesala del propio Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, para adelantar que aprovecharía para afiliarse, a pesar que es más militante del PT de Alberto Anaya.
También la tarea la lleva el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez que buscará allegarle a Andy la mayoría de legisladores, proyectistas, secretarios, y personal que labore en las áreas de ese partido. Ahí se va a ver quien tiene la camiseta bien puesta.
La afiliación parecería ser una purificación de los pecados de corrupción y desvíos de dineros de esos flamantes (gobernadores y legisladores) militantes, es decir, afiliarse al gobierno, es como comprar la impunidad del sexenio. Hoy en Morena son ejemplo a seguir, antes en el PRI y el PAN eran rateros, corruptos, no tenían llenadera, saqueadores del erario, en fin.
