CIUDAD DE MÉXICO.- El Gabinete de Seguridad del Gobierno de México, informa que derivado de seis meses de trabajos de Inteligencia e Investigación y una operación simultánea realizada en la Ciudad de México, Estado de México y Querétaro, se detuvieron 32 personas con lo que se desmanteló una de las principales redes criminales dedicadas al robo y comercialización ilícita de hidrocarburos en la zona centro del país.
En el operativo se aseguraron casi 16 millones de pesos en efectivo, 12 inmuebles, 21 tractocamiones 14 semirremolques, 5 remolques, 14 contenedores tipo tanque y autotanques, 8 pipas, 5 cajas secas, un tanque estacionario, 48 vehículos, un autobús, 12 motocicletas, 36 armas de fuego, una bodega, diversas dosis de drogas y cajas de medicamentos controlado, se clausuraron 12 tomas clandestinas y se rescataron diversos animales exóticos.
Acompañado del fiscal general, Alejandro Gertz, y de los titulares de las secretarías de Defensa, Marina, y del comandante de la Guardia Nacional, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, explicóo que la lucha contra el robo de combustible, o huachicol, como se le conoce popularmente, es una prioridad para el Gobierno desde los años del expresidente Andrés Manuel López Obrador. “Se hacen operaciones diarias. Pero de esta, como es tan grande, informamos de manera distinta”, ha explicado el funcionario. “La desarticulación de redes no solo afecta a capacidades operativas y financieras de estos grupos, sino que reafirma el compromiso de este Gobierno contra la impunidad”, añadió.
García Harfuch detalló que la red perforaba ductos de Pemex en el Estado de México, Hidalgo y Querétaro, para extraer gasolina y gas LP. Los criminales almacenaban el combustible en bodegas y luego lo distribuían. La red “contaba con una red de distribución ilegal a gasolineras. Algunos de sus integrantes se dedicaban a elaborar documentos falsos y mantener vínculos con autoridades locales para facilitar sus operaciones”, ha explicado Harfuch. El secretario destacó la captura de los dos líderes principales de la organización, Cirio Sergio N y Luis Miguel N, alias El Flaco de Oro.
Ni Harfuch ni Gertz, que también ha hablado a los medios, han dado detalle alguno de las autoridades coludidas con la red criminal, a pesar de la insistencia de los reporteros. Al momento se ignora si se trata únicamente de autoridades locales, o si hay también integrantes de corporaciones estatales o federales involucrados. En su inervención, Gertz Manero destacó “la cobertura territorial” del operativo, que se ha desarrollado en varios municipios de tres estados al mismo tiempo. Entre ellos figuran Ixtlahuaca, Polotitlán, Huehuetoca o Jilotepec, en el Estado de México, Tlalpan, en la capital, y la ciudad de Querétaro.
En total, las autoridades han realizado 12 cateos de manera simultánea. La cantidad de maquinaria decomisada permite intuir el gran tamaño de la operación criminal. Los agentes se incautaron de 21 tractocamiones, 14 semirremolques, ocho camiones cisterna, un tanque estacionario de 27 metros de largo y 48 vehículos, entre ellos carros blindados y camionetas de alta gama. Ni Harfuch ni Gertz han estimado el valor del material decomisado.
Este caso se suma a la intercepción, en marzo, de un buque en un puerto de Tamaulipas, en el Golfo de México, que cargaba combustible importado de manera ilegal, pasado por aduana con una etiqueta falsa. El buque contenía 10 millones de litros de combustible, que iban a alimentar el mercado negro. El huachicol supone un quebranto para el Estado mexicano de unos 177.000 millones de pesos al año, unos 9.200 millones de dólares, de acuerdo con los cálculos de especialistas.
AM.MX/fm