JORGE HERRERA VALENZUELA
Vayámonos con calma. Guardemos la serenidad. No precipitemos comentarios. Tenemos que aprender a vivir una etapa inédita. Estamos en el México de lo insólito. Bien ha comentado mi amigo y colega Roberto Vizcaíno que el pasado está borrado desde la noche del domingo 1 de julio de 2018 y unas horas después de ese día, el Presidente de México, Enrique Peña Nieto coloquialmente entrega el despacho presidencial, en Palacio Nacional, al incansable tabasqueño que arrasó, en las urnas, en treinta Estados y en la Ciudad de México. Más de treinta millones de mexicanos han depositado su confianza en Andrés Manuel López Obrador.
La presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Janine Otálora Malassis, le entregó al triunfante candidato presidencial la constancia que lo acredita como Presidente de los Estados Unidos Mexicanos para el período 2018-2024. Poco después de la una de la tarde, el hombre que asumirá su responsabilidad la mañana del próximo sábado 1 de diciembre, inició su mensaje lanzando tres ¡Viva México!
Mientras se consumaba ese trascendental acto, el cuarto en el presente Siglo XXI, ya había corrido la noticia de que la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo Morales, por un fallo judicial, quedaba absuelta de los delitos de lavado de dinero, delincuencia organizada y defraudación fiscal que le imputó la Procuraduría General de la República y por los cuales fue aprehendida, dentro de un avión particular, en el Aeropuerto Internacional de Toluca, México. Eso ocurrió la noche del 26 de febrero de 2013 y a las 23:30 horas del martes 7 del presente mes, el abogado de la profesora chiapaneca fue notificado de la orden de libertad para su clienta.
Leí que la respetable ministra en retiro María del Carmen Olga Sánchez Cordero Dávila, próxima titular en las oficinas del Palacio de Covián, comentó que el doble suceso era una “coincidencia histórica” y en cierta forma comparto su afirmación. El tabasqueño, que a partir del pasado miércoles dejó de ser “El Peje”, trabajó incansablemente ¡12 años! para convertir su propósito en realidad. La otrora poderosa lideresa del gremio magisterial se enfrentó al “niño atlacomulquense” desde la campaña político electoral de 2011, le jugó las contras al PRI y a los tres meses de iniciado el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto le cobraron la factura y precisamente tres meses antes del final, “La Maestra” está libre.
Los mal pensados, que “habemos” muchos en todo el país, creen que un acuerdo entre el que se va, cargando la impopularidad, y el que llega como “rayo de esperanza”, decidieron abrir las rejas de la prisión (que estuvieron siempre abiertas) para no dejar una pesada carga al nuevo gobierno federal. En el párrafo anterior anoté que “en cierta forma comparto” la afirmación atribuida a la jurista Sánchez Cordero, porque la administración entrante sería severamente criticada por otorgarle la libertad a la profesora chiapaneca que nunca ocultó su simpatía por el ahora Presidente Electo. En verdad, estamos ante una extraña coincidencia histórica.
PREGUNTA PARA MEDITAR:
¿Cuántos presos bajo procesos penales federales están en prisión, sujetos a procesos y, al paso de cinco años, nos les prueban ser responsables de lavado de dinero, de delincuencia organizada y de defraudación fiscal?
ANA GABRIELA A LA CONADE
De nueva cuenta una estrella del deporte mexicano estará al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, la CONADE. La campeona mundial en la carrera de 400 metros, Ana Gabriela, fue notificada el martes pasado de que será la titular de un organismo que anda de capa caída. Su nombramiento fue bien recibido en el medio deportivo y mucho se espera de la todavía senadora Ana Gabriela Guevara Espinoza, quien hace 10 años fue la directora del Instituto del Deporte en el Distrito Federal. La exvelocista conoce muy bien la problemática deportiva, goza de simpatías y contará con el apoyo de muchos de sus compañeros. Sus antecesores en el cargo, el marchista Raúl González, el pentatleta Iván Sisniega, el futbolista Carlos Hermosillo y el clavadista Jesús Mena, entre otros.
CUAUHTÉMOC, GOBERNADOR; NEGRETE, ALCALDE
Por esta ocasión, otro comentario político-deportivo. Todo mundo, bueno casi en todo el orbe, se comenta que por primera vez un exfutbolista profesional, estrella de Las Águilas del América, el tepitense Cuauhtémoc Blanco Bravo es gobernador electo del Estado de Morelos, después de su controvertida actuación como presidente municipal de Cuernavaca. Pronto sabremos cómo se desempeña y en la Capital del País, otro exfutbolista ya es Alcalde electo de Coyoacán. Se trata de Manuel Negrete Arias, a quien se recuerda por el gol que le metió a la Selección de Bulgaria, en el Estadio Azteca, durante el Campeonato Mundial de 1986, tras recibir un pase de Javier “El Vasco” Aguirre. La FIFA clasificó en quinto lugar ese “hermoso gol” en la historia de los mundiales. Bueno, pues, ahora sabremos si el guerrerense puede ser buen administrador en una Alcaldía, antes Delegación, que confronta múltiples problemas y donde ha reinado la corrupción.
SE IMPUSIERON LAS MUJERES
Brillante e histórica actuación tuvieron nuestros jóvenes deportistas que participaron en los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados en Barranquilla, Colombia, del 19 de julio al 3 de agosto. Después de más de 50 años, los mexicanos desbancaron a los imponentes cubanos, logrando México un total de 341 medallas: 132 de oro, 118 de plata y 91 de bronce. Las mujeres sentaron un precedente al obtener 180 medallas por 161 de los hombres. La Delegación Mexicana estuvo integrada por 675 atletas, destacando los seleccionados del Estado de Jalisco. Asistieron representantes de 37 países, se compitió en 44 deportes y el total de participantes fue de 5,424 deportistas. El licenciado Carlos Padilla Becerra, presidente del Comité Olímpico Mexicano entrega buenas cuentas y queda listo para los eventos internacionales de los dos próximos años.
P.D. Después de la “barra deportiva”, vamos a la agenda de este mes. Me encuentro con que en este domingo 12 se cumplen 107 años del nacimiento de Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes, mundialmente conocido como “Cantinflas”, cuya carrera comenzó en los años 30 del siglo pasado en las carpas del Distrito Federal, vistiendo con pantalón parchado, sujetado con un lazo, debajo de la cintura y con una “gabardina” sobre el hombro, que no era más que una tira de casimir, además de su inconfundible gorra “cuartelera”. Mario Moreno Reyes con su primera película a color, “El Padrecito”, dejó de usar su tradicional indumentaria y hasta “El Barrendero” siempre dejó mensajes que no han perdido actualidad; actuó como profesor rural, médico del IMSS y embajador, entre otros personajes que incluyen a un diputado a un fotógrafo callejero y a un barrendero.
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