Claudia Rodríguez
¿Cómo puede un funcionario público mantenerse en su puesto año tras año cuando ha sido señalado una y otra vez, cuando menos de opacidad en el manejo de los recursos públicos a su cargo?
Alfredo Castillo, quien al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), habría de responder de las observaciones que la Auditoría Superior de la Federación (ASF), realizó a los ejercicios de 2015 y 2016 por casi 2 mil millones de pesos; es uno de los hombres de Enrique Peña Nieto, que sigue aplicando el fraude en el manejo de recursos y hasta ahora más que protegido, ya no tanto por el mismo grupo de poder; sino por todos los otros funcionarios que alegremente le entraron al “moche” a lo grande, a través de saquear las arcas del dinero público destinado a sus dependencias.
Castillo ha sido una y otra vez, como funcionario del deporte, señalado por sus trapacerías no de manera independiente, sino por las mismas federaciones deportivas, quienes acusan no recibir ni un peso para el desarrollo y participación competitiva de sus atletas. No obstante, Castillo sigue en su cueva de Ali Baba.
Antes de la salida del equipo cerrado de Peña Nieto, de los primos de Alfredo; tanto Humberto Castillejos Cervantes, quien fuera responsable de la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República hasta junio de 2017; así como del que fuera titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Raúl Cervantes Andrade –con serias aspiraciones a la Fiscalía General–, cualquiera pensaría que de ahí la protección directa a quien sigue presidiendo la Conade.
Pero hay más. Es la maña la que ha unido a todo ese grupo de desfalcadores de la nación, quienes además creían fehacientemente hasta antes de la derrota de José Antonio Meade en las urnas, que la justicia se aplicaba sólo en los enemigos políticos y el pueblo indefenso.
Hoy el primo de la triada Castillo y sobreviviente del sexenio peñista, nos pone a los mexicanos en el centro del huracán de la corrupción a nivel internacional; luego de que se gestionaron ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), fondos por casi 400 mil pesos para organizar los foros “Promoción de la Salud a través del Juego Limpio sin Dopaje: Simposios Regionales Antidopaje”, que debieron iniciarse en el 2017, y con diversas excusas, hasta de veda electoral, no se han concretado.
Ya la organización internacional ha solicitado el reembolso, anexando copia a la misma Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), que igual ha requerido se reintegre el dinero a la UNESCO.
Lo que queda claro, es que tantas largas de Castillo sobre el recurso, sólo indica una cosa: “ya se gastó”.
¿Y se van a ir tan tranquilos luego del desfalco a la nación y usar a México ante el mundo para sus trapacerías? Casi, casi como Enrique de la Madrid su promoción de México al mundo.
Acta Divina… El presidente Enrique Peña Nieto nombró al frente de la CONADE en 2015 a Alfredo Castillo, para luego ratificar su puesto en 2016.
Para advertir… Oro olímpico a la corrupción de Castillo et. al.
