martes, diciembre 3, 2024

A cien años de la muerte de Franz Kafka

CIUDAD DE MÉXICO.- Franz Kafka es uno de los grandes iconos de la literatura existencialista y del absurdo que a menudo escribió sobre temas de aislamiento, alienación y opresión autoritaria. Sus obras más conocidas incluyen el relato La metamorfosis, en el que el protagonista se transforma en un escarabajo, así como En la colonia penitenciaria, Un artista del hambre y las novelas El proceso, El castillo y la inacabada Amerika.

De acuerdo con okdiario, también destacan las observaciones autobiográficas y las ideas literarias extraídas de sus numerosos diarios, así como su famosa Carta al padre, en la que intentaba explicar su tensa relación y sus peculiaridades emocionales.

Kafka nació en Praga en 1883. Se quejaba de sentir que tenía poco en común con otros judíos. Sólo asistía a la sinagoga cuatro veces al año, hablaba principalmente alemán (aunque el checo había sido la lengua de su infancia) y tenía poca relación cultural con la comunidad judía, a excepción de los grupos de teatro. Su familia, burguesa de clase media, aspiraba a ascender y a ser aceptada en la sociedad alemana.

Murió el 3 de junio de 1924 por complicaciones relacionadas con la tuberculosis en Klosterneuburg (Austria) después de haber contraído pulmonía en la Navidad de 1923. Debido al gran dolor que sentía en la garganta a causa de esta enfermedad, en sus últimos días no podía comer y apenas beber.

Se quejaba de sed en las cartas que enviaba a su padre, y al final se cree que simplemente muriera de hambre. Está enterrado en Praga, en la sección judía del cementerio de Strasnice junto a madre y su padre. Sus tres hermanas murieron en campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

Influencia en otros autores
Su impacto en la literatura está marcado por su estilo de escritura. Sus obras se caracterizan por una naturaleza surrealista y alegórica que desafía a los lectores a trascender los límites de la realidad. Influido por Fiódor Dostoyevski y Friedrich Nietzsche, Fafka a su vez dejó huella en Albert Camus, Jean-Paul Sartre, Jorge Luis Borges o Gabriel García Márquez.

Estilo de escritura de Kafka
Sinónimo de existencialismo y surrealismo, Franz Kafka es un enigma literario, cuyas obras han influido en la literatura del siglo XX. La relación de Kafka con su padre, Hermann Kafka, fue compleja, llena de tensiones e influencias que dejó gran una huella en él.

Hermann, una figura dominante y autoritaria, moldeó la percepción que Kafka tenía de la autoridad y la paternidad, temas que se repetirían a lo largo de toda su obra literaria. Su dominio de la fábula es uno de los rasgos distintivos de su narrativa.

Sus relatos concisos y alegóricos en sus grandes narraciones le sirvieron para transmitir ideas filosóficas complejas y dilemas existenciales. Estas parábolas funcionan a menudo como enigmáticos espejos que reflejan lo absurdo de la existencia humana.

El absurdo es un tema omnipresente en sus obras, en las que se hace eco de las ansiedades e incertidumbres de la era moderna. Sus protagonistas se ven a menudo atrapados en situaciones surrealistas y de pesadilla, en las que el mundo racional se desintegra en lo irracional.

La representación que hace de lo absurdo reta a los lectores a enfrentarse al absurdo inherente a la vida misma, reflejando la desorientación que se experimenta en un mundo que cambia rápidamente.

La introspección es otro elemento vital del estilo de escritura de Kafka. Sus personajes se entregan a una profunda autorreflexión y al análisis introspectivo, revelando a menudo la naturaleza fracturada de sus identidades.

Edgar Allan Poe y Kafka
Se desconoce si Franz Kafka pudo leer a Edgar Allan Poe, aunque en diferentes ocasiones se ha comparado a estos dos autores, debido a que los dos son considerados como (de)constructores del estilo existente del género del relato corto. Sin embargo, lo más interesante es que ambos han empleado tácticas similares de sacrificar a sus personajes al final de sus relatos.

En el cuento La Metamorfosis el protagonista parece un insecto y en El gato negro de Edgar Allan Poe la muerte del animal son ejemplos paralelos de los enfoques que los dos famosos autores emplean para retratar la vida malvada y de pesadilla que presenta el mundo.

Kafka y Poe parecen fascinados por la narración de historias no sensacionalistas que utilizan la muerte final de los personajes. Explotan la elección de palabras, la estructura de las frases y el estilo de escritura para cuestionar el destino de los protagonistas de sus historias.
AM.MX/fm

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