Aletia Molina
¿Andrés Manuel López Obrador olvidó el “plantón” que al cierre de julio de 2006 instaló y con la anuencia y “silencio cómplice” de su sucesor en el gobierno capitalino y ahora subflorero, Alejandro Encinas, mantuvo durante 48 días sobre Paseo de la Reforma, para protestar por el supuesto fraude electoral del que, aseguró, había sido víctima y le impidió llegar, entonces, a la residencia oficial de Los Pinos?
Tendría que tener muy corta la memoria para haber olvidado las decenas de ocasiones en que, al frente de activistas presuntamente traídos desde estados del sureste mexicano, ocupó por largos periodos la plancha del Zócalo capitalino, misma que sólo abandonó después de ver colmadas sus reclamos y exigencias “sociales”.
Lo anterior por lo siguiente, al margen de la opinión que cada quien tenga respecto al Frente Nacional antiAMLO (FRENAA), liderado por el Gilberto Lozano, él y miles de sus seguidores fueron impedidos de avanzar hacia la Plaza de la Constitución donde confiaban instalar un plantón en demanda de la dimisión del tabasqueño, por un vasto dispositivo montado por miles de efectivos de la policía local apoyados por elementos de la Guardia Nacional y, finalmente, hasta del Ejército.
Un dispositivo coordinado desde la oficina de la siempre “pendiente” Claudia Sheinbaum, fue más allá de “tratar de disuadir” a los miles de manifestantes que intentaban llegar a las puertas de Palacio Nacional, pues, en un momento dado, no sólo cargó en su contra sino que, incluso, los despojó de sus pertenencias… de decenas de casas de campaña donde aquellos preveían instalarse, en un acto excesivo que bien podría ser tipificado como robo con violencia (institucional, quede claro).
Insisto, estén o no a favor de FRENAA, lo ocurrido en los accesos al centro capitalino implica una evidente exhibición de intolerancia y violación del más elemental derecho de tránsito de los mexicanos.
#AlCalce
El llamado Frente Nacional (FRENAAA) acudió a manifestación pacífica en la Ciudad de México que pretendía ir del Monumento de la Revolución al Zócalo Capitalino, pero ante un fuerte contingente de policías que les prohibió el paso, optaron por armar su campamento en la Avenida Juárez.
A través de sus medios oficiales, FRENAAA convocó a ocupar el Zócalo de manera indefinida a través de los trends #SomosMéxico y #OcupaLaPlaza, pues esta misma acción sería realizada, informaron, en cinco diferentes ciudades de la República.
De acuerdo con el comunicado de prensa, su principal exigencia en lo que llaman “la primera etapa”, es la renuncia definitiva de López Obrador.
Las razones tras su exigencia son siete y tienen que ver con la economía, la salud, el manejo de la pandemia por COVID-19, las recientes confrontaciones en La Boquilla, el supuesto autoritarismo, así como la presunta corrupción de los funcionarios ligados a la 4T.
FRENAAA es un Frente Ciudadano que asegura estar consciente de que “la única forma de evitar esta dictadura que se está instaurando en el país es hacer que todos los mexicanos salgamos de nuestra zona de confort y nos unamos, para ejercer nuestro derecho constitucional de cambiar inmediatamente la forma de gobierno (Art. 39)”
Además, se describen a sí mismos como un movimiento nacional pacífico, no violento, auténticamente ciudadano, que representa a los mexicanos de trabajo y soberanos de México, que son Mandantes Constitucionales (Art. 39) y luchan a través de la Protesta, Resistencia y Desobediencia Civil por un México nuevo.
Aletia Molina
@AletiaMolina