Foto: INAH
CIUDAD DE MÉXICO, 4 DE ENERO (Almomento.MX).- La existencia de un santuario rectangular, ubicado en medio de un estanque, genera el efecto óptico de lo que se cree sea un modelo miniatura del universo. Así lo señala la arqueóloga Iris del Rocío Hernández, responsable de la investigación arqueológica en entrevista con Notimex.
“La intención de que el agua rodeara elementos arquitectónicos rituales específicos parece haber sido una parte importante del pensamiento mesoamericano, lo vemos en Teotihuacán, como lo reportaron recientemente Julie Gazzola y Sergio Gómez”, señaló la especialista.
Rocío Hernandez comentó que existe la posibilidad que donde yace Nahualac es una representación de un espacio ritual, donde el culto a Tláloc es evidente, aunque no exclusivo, ya que también guarda relación con entidades femeninas del agua y la tierra.
La arqueóloga menciono que fue 2015 cuando se creó el proyecto arqueológico Nahualac, debido a una denuncia de destrucción del sitio. Un año pasó para que un equipo multidisciplinario emprendiera una temporada de excavaciones, misma en la que se recuperaron numerosos fragmentos cerámicos, materiales líticos, lapidarios y restos orgánicos.
Los objetos recuperados actualmente se encuentran en proceso de análisis con la colaboración del doctor Emiliano Melgar, del Museo del Templo mayo, a través del Proyecto estilo y tecnología de los Objetos Lapidarios en el México Antiguo.
Su estudio dará pistas sobre su contenido de los objetos.
AM/MX ioga