Andy S. K. Brown
E Insiste en ser segundona
Otra Faramalla en Morelos
Lenia, ‘deja a esta hija de…’
¡No tiene remedio la señora Sheinbaum!
Aunque muchos sabemos que lo dice de dientes para afuera, ayer en la conmemoración de los primeros cien días en que supuestamente debió haber iniciado una nueva Administración, ella insistió en el discurso del continuismo.
“Nos critican algunos medios, la comentocracia, ¿por qué no nos diferenciamos, por qué defendemos los programas del bienestar, por qué hay continuidad? Pero si siempre lo dijimos, ¿cuál sorpresa? Por eso luchamos durante todos estos años, para eso nos eligieron, para dar continuidad a la transformación iniciada en el 2018, que se oiga bien, lejos, fuerte, no vamos a regresar al modelo neoliberal”
Nadie, empero, le acusa ni le critica por la continuidad de los programas, pero sí se le cuestiona que aún no haya impreso un sello propio. Sigue usando el de su antecesor, hasta en el modito de hablar.
¿Cuándo será ella misma?
¿Por qué insiste en ser la subordinada? ¿La número dos? Le corresponde el uno.
O ¿así está a gusto?
* * *
En Morelos muy pocos son quienes creen en las palabras de Margarita González, su actual gobernadora.
En su discurso por los primeros cien días de su administración instruyó al consejero jurídico del gobierno estatal a presentar denuncias ante la Fiscalía Anticorrupción en contra de aquellos que formaron gobierno con Cuauhtémoc Blanco y a los que se les observaron discrepancias durante la entrega – recepción.
¿Acusación directa contra Blanco? ¿Contra sus familiares incrustados en todas las nóminas?
Para nada. El responsable de todas las tropelías toleradas por los morelenses goza de fueron constitucional. Sus familiares también gozan de la protección de AMLO, que es quien manda en Morelos y en todo el país.
¿Para qué entonces la faramalla, doña Margarita?
* * *
La ministra Lenia Batres trasladó el patio de la vecindad en donde vivía a los pasillos y los salones de la Suprema Corte.
En reciente sesión pugnó por rebajar las percepciones de ella y de sus pares y restringir lo que en su cabecita suena a privilegios. No prosperó la moción.
Y probablemente enojada por el revés salió a despotricar en contra de quienes no avalaron su propuesta. Incluso en contra de su correligionaria y compañera en muchas batallas “en contra de la corrupción y el neoliberalismo”, Yazmín Esquivel.
De ella dijo que sólo defiende sus privilegios, coincidiendo con el video en el que se le ve adquiriendo un collar de diamantes en una tienda del crucero más caro del mundo.
Y sin el collar puesto, porque dice que no lo compró ni se lo regalaron, la también llamada “ministra pirata” –por aquello del plagio de las tesis– le respondió a Batres que ella viajaba con su dinero, y no con el de los contribuyentes, como sí lo ha hecho doña Lenia.
No se sabe si en el próximo match entre ellas, la “ministra del pueblo” salga corriendo y gritando algo así como “¡ya deja a esta hija de su re… madre!”.
¡Qué bonita vecindad!, decía el cómico.
@AndySKBrown1