domingo, diciembre 22, 2024

PÍLDORAS DEL LENGUAJE

Por Pedro Camacho

El término leso (y su femenino lesa) es un adjetivo que proviene del latín, y significa lesionado, agraviado, dañado, ofendido. Se aplica para referirse a acciones nocivas y, curiosamente, no se coloca después del sustantivo, como ocurre con la mayoría de los adjetivos, sino después. Así, lo correcto es hablar de un “delito de lesa humanidad”, o sea un delito que daña a la humanidad, y no se debe decir “de humanidad lesa”. Ello a pesar de que nadie se referiría a un delito de agraviada humanidad sino a uno de humanidad agraviada, en todo caso.

Artículos relacionados