José SÁNCHEZ LÓPEZ
JAVIER HERRERA VALLES, como coordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal Preventiva, sufrió en carne propia los embates del poder del Estado. En febrero y en mayo de 2008 envió dos cartas a FELIPE CALDERÓN HIOJOSA, entonces presidente de la República. En ambas misivas le advertía sobre la corrupción de su “súper policía”; GENARO GARCÍA LUNA, ahora preso en Estados Unidos y bajo el riesgo de ser condenado a cadena perpetua, como su protegido, JOAQUÍN “Chapo” GUZMÁN.
Creyó en la justicia y eso le costó 3 años y 9 meses de prisión, Fue detenido el 18 de noviembre de ese mismo año y mediante testigos protegidos lo acusaron de sostener vínculos con los Beltrán Leyva y el Cártel de Sinaloa. Se le sentenció a 10 años de prisión e inhabilitado de por vida para ejercer cargos públicos. Cuatro años después, el 6 de septiembre de 2012, fue absuelto de todos los cargos y liberado.
Ya para entonces ni CALDERÓN ni GARCÍA tenían poder. Sólo así fue posible que JAVIER saliera de la cárcel y ahora reclama una indemnización de más de 70 millones de pesos, pero el ministro, JUAN LUIS GONZÁLEZ ALCÁNTARA CARRANCÁ, de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia, argumenta que: “(…la Fiscalía General de la República (antes PGR) no incurrió en ninguna actividad administrativa irregular.
Así que no hay dinero.
Empero, todas esas vicisitudes parece que no causaron mella en el ahora secretario ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad de Campeche, quien ante el escenario que vive la entidad por la protesta generalizada de los policías, luego de los vergonzantes hechos del operativo en el penal de Cobeh, guarda ominoso silencio.
JAVIER no llegó de casualidad a ese cargo. El 21 de septiembre de 2021, LAYDA ELENA SANSORES SAN ROMÁN lo llevó a Campeche, ya como gobernadora.
Antes, JAVIER fue su director de Mercados cuando ella fungió como alcaldesa de Álvaro Obregón, en la Ciudad de México. Un área estratégica por la recaudación de cientos de miles de pesos que llegan a las arcas administrativas y sirven para atender los caprichos del jefe delegacional en turno.
El favor estaba pagado.
Ahora, tras los deplorables hechos en el Centro de Reinserción Social de San Francisco Kobén, el viernes 15 de marzo, en los que mujeres policías fueron vejadas, mancilladas, y que aún así tuvieron los arrestos de dar la cara para exigir justicia, por la estúpida decisión de mandos superiores a lo que no fueron ajenos ni la campechana SANSORES ni el duranguense HERRERA, ambos hace mutis.
Tras el mayúsculo escándalo, los señalamientos se centran en la secretaria de Seguridad Estatal, MARCELA MUÑOZ MARTÍNEZ, quien por cierto fue su jefa de policía en la misma demarcación capitalina, y a la que responsabilizan de lo sucedido y exigen su destitución.
Pero ésta ha estado más ocupada en organizar una lujosa fiesta para la boda de su hijo, en la opulenta Mansión Umaya, uno de los sitios más aros y exclusivos del estado, sólo para millonarios.
Cómo va a tener tiempo para atender, cuidar y ordenar que brindaran las atenciones necesarias a las policías agredidas.
Sin embargo, la hija del Patriarca de Champotón sostiene contra viento y marea a su consentida y de JAVIER ni sus luces.
Obviamente, en el enjuague no sólo está MARCELA, sino otros mandos que también tuvieron participación, pero es más que evidente que motu propio, no hubieran podido tomar tan absurda decisión.
Es decir que LAYDA, JAVIER y MARCELA tienen mucho que decir al respecto, porque la tercera no se mueve sin la autorización del segundo y éste tiene que pedir permiso a la primera.
Para nadie en el estado pasa desapercibida la ostentación de la nueva casta dorada que acompaña a la gobernante, pues las fiestas en yates de lujo y autos de alta gama, son el sello de la cacareada austeridad republicana que se pregona desde el púlpito de Palacio Nacional.
Y mientras los policías siguen en paro, el olvidadizo JAVIER guarda silencio y repite los abusos que cometieron con él. No los veo ni las oigo*** EL ABUSO DE PODER NACE DEL MIEDO A PERDERLO-***AU REVOIR.
joebotlle@gmail.com