jueves, junio 20, 2024

1 de cada 5 mujeres en Ciudad de México tiene más de 60 años de edad

CIUDAD DE MÉXICO / SemMéxico.- Una de cada cinco mujeres en la ciudad de México es una persona con más de 60 años de edad, son cerca de 900 mil mujeres adultas mayores, lo que representan el 18 por ciento de la población total del país.

Así la capital del país vive la feminización del envejecimiento, aseguró la doctora Verónica Montes de Oca Zavala.

Precisó que mayor población de mujeres de 60 años y más no significa que tengan una mejor calidad de vida, siguen con desigualdades en la participación económica, en la fata de seguridad social, en el acceso a la salud, sufren todas las violencias y son discriminadas por ser mujeres y por la edad, incluso la feminicida, de la que casi no se habla, a pesar de que contribuyen con el trabajo no remunerado a la riqueza del país, con la aportación de más del 22 por ciento del Producto Interno Bruto, una riqueza que no se les devuelve.

Expresó lo anterior en la conferencia “Las Mujeres Mayores en la Ciudad de México” en conmemoración del “Día Mundial de Toma de Conciencia de Abuso y Maltrato en la Vejez” el 11 de junio, moderado por la doctora Georgina Cárdenas de la Federación de Mexicanas Universitarias (FEMU) en el Museo de la Mujer.

La coordinadora del Seminario Universitario Interdisciplinario sobre Envejecimiento y Vejez de la UNAM, (SUIEV) y consultora para la CEPAL en la división de Población, señaló que se requiere un Sistema Nacional de Cuidados que comience con las poblaciones mas vulnerables como las mujeres adultas mayores porque también está vinculado a la discapacidad y a las enfermedades crónico degenerativas. Se estima que en la ciudad de México 61.6 por de las mujeres tienen alguna discapacidad contra 38.2 por ciento de los hombres.

Además, las mujeres mayores de 60 años están mandatadas por su familia, pareja, hijos, hijas, la sociedad a cuidar de los demás, a las mujeres mayores se les expropia el uso del tiempo, no es para ellas mismas es para los demás, precisó.

Esto no ha cambiado, Montes de Oca Zavala hizo referencia a Graciela Hierro Pérezcastro, una de las impulsoras de la filosofía feminista ,que en 1998 señalaba que las mujeres llegan a ser mayores en una situación de desventaja vinculada con su trayectoria de vida.

La vulnerabilidad y desigualdad que experimentan en la vejez es una construcción cultural que empieza en la cuna, y existe a lo largo de su ciclo vital para los otros, para cuidar a las hijas e hijos y al esposo. La cualidad mas apreciada de las mujeres es ser cuidadora con abnegación y renunciamiento para ser consideradas buenas mujeres y madres. En tanto al hombre se le estima por su ambición personal y capacidad de mando.

Verónica Montes de Oca explicó que la ausencia de un sistema de cuidados recae en las mujeres y profundiza su desigualdad social ante la saturación de actividades en reproducción social. Esto profundiza el trabajo no remunerado de las mujeres, la desigualdad del salario, el bajo ingreso que reciben lo que también lleva a una feminización de la pobreza.

Detalló los indicadores demográficos que han incidido a esta situación como la disminución de la tasa de fecundidad, la disminución de la mortalidad materno infantil, la migración interna nacional e internacional en la que la violencia que vive el país ha contribuido. En la Ciudad de México al igual que en el país la composición de los grupos de población ha ido cambiando lo que mostró en gráficas.

Disminuyó la tasa de fecundidad de 7 hijos por mujer en 1960 a 1.9 por mujer en el 2023, México ya se encuentra debajo del nivel de reemplazo, hay países que ya no se reproducen así mismo como Japón y Corea.

También disminuyó la mortalidad y esto es un indicador del desarrollo de la condición de las mujeres; de 317 muertes por cada mil niños nacidos vivos en 1930 pasamos a 12 muertes por cada mil niños nacidos vivos en 2015.

La esperanza de vida de las mujeres fluctuaba entre 1970 y 1980 entre 62 y 66 años, respectivamente, en 2012 ha llegado a los 78 años, les aventajan seis años más a los hombres.

Respecto a la migración interna señalo que la Ciudad de México en la década de los 50s y 60s, por la estrategia centralizada recibía migrantes que envejecieron aquí, ahora son otras condiciones de la expulsión de sus lugres de origen como la violencia. Señalo que en 2010 en un trabajo de campo le tocó ver los primeros indicios en Guanajuato, e igual iniciaba en Zacatecas y San Luis Potosí. Guanajuato mencionó tiene el 30 por ciento de población de 60 años y más.

En la ciudad de México ha disminuido muchísimo más la mortalidad a consecuencia del desarrollo económico de los años 70s, 80s, 90s, lo que va acompañado por mayores tasas de participación económica de hombres y mujeres, mayor nivel de educación y también a que muchos hombres y mujeres decidieron no tener hijos.

Esto provocó que desde 1990 al 2010 se incrementó la población de 60 años y más y un descenso de las edades más jóvenes menores de 15 años y de 15 a los 29 años.

La Violencia

Se refirió a las violencias que experimentan las mujeres mayores, la económica, la física, la psicológica, la sexual, la violencia infraestructural porque el diseño urbano no está diseñado para las mujeres con discapacidad.

Mencionó que las muertes de las mujeres mayores se hacen invisibles en las estadísticas, lo ha señalado la ONU, y hay que hablar de las mujeres mayores en una sociedad que las discrimina sólo por ser mujeres y por la edad, esa es una doble vulnerabilidad.

Respecto al tema de los cuidados señalo que la pandemia del Covid 19 puso de relieve la importancia a nivel mundial y que en este sentido la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ha propuesto cambiar el paradigma de desarrollo hay que hablar de la sostenibilidad de la vida, cambiar modelos económicos, pensar en una sociedad de cuidados, en el cuidado del planeta y de las poblaciones.

Por otra parte, señaló que los datos nos dicen que las mujeres mayores viven en pobreza y con discapacidad, por lo que hay que pensar en mejorar las condiciones de vida de las adultas mayores y las generaciones que vienen, las que ya tienen más de 40 años que van a ser las que tendrán 80 o más años. Se tiene que parar la discriminación por edadismo y todas las violencias.

Hablo sobre la importancia de la trayectoria laboral desigual o dispar, una mayor esperanza de vida de las mujeres, en lugar de ser algo grandioso al saber que tenemos mayor esperanza de vida, la oferta de empleo es precario, sin contrato, ni prestaciones sin seguridad social y con ocupaciones segregadas, discriminatorias y feminizadas. .

Se refirió a Help Age Internacional, organización no gubernamental que contribuye a que las personas mayores puedan reclamar sus derechos, oponerse a la discriminación y superar la pobreza, que promueve que hay que avanzar en igualdad y de también que tienen que ser más visibles las estadística porque hay países que no separan los datos por sexo desde una perspectiva de género, lo que permite ver las disparidades o desventajas en las que viven las mujeres.

Refirió que la perspectiva de género permite analizar las actividades económicas remuneradas de las mujeres; los regímenes de pensiones; su desvinculación con el marco normativo de la seguridad social y los mecanismos de la reproducción social.

Mencionó que el 13 de diciembre del 2022 el gobierno mexicano ratificó la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos de las Personas Mayores, lo que permite ver con mayor certidumbre jurídica a las personas mayores.

También recomendó leer la Constitución de la Ciudad de México porque es interesante el planteamiento del cuidado en dos temporalidades: uno que podría entenderse desde el sistema de la protección social y desde un enfoque de curso de vida, que integra a toda la población y ve preventivamente los elementos simbólicos y materiales para el desarrollo humano.

Mencionó recomendaciones generales para mejorar la calidad de vida de las mujeres adultas mayores como tener una perspectiva de género en las políticas públicas para las personas adultas mayores; incrementar la seguridad social para las mujeres adultas mayores; mayor participación del trabajo femenino remunerado igual a los hombres; nuevo pacto social para las tareas reproductivas; establecer tablas únicas de mortalidad; igualar la edad de jubilación de mujeres y hombres.
AM.MX/fm

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