viernes, abril 19, 2024

SENDERO POLÍTICO: Impunidad y complicidad

Por: José Cruz Delgado

La ASM, se ha convertido en una agencia de colocaciones para los diputados.

Yarabí Ávila demostró tener más pantalones que los varones diputados

Quintana descubre el “hilo negro” en la administración ponchista

En una sesión sin precedente del Congreso de Michoacán celebrada la semana pasada, los legisladores le dieron total impunidad al Auditor Superior de Michoacán José Luis López Salgado, sobre el que pesan serias acusaciones de corrupción de las que dan cuenta medios locales.

Sucede que algunos “representantes populares”, sí, aquellos que dicen proteger y velar por el bienestar de los michoacanos, rechazaron, por mayoría el dictamen en donde se solicitaba que el Auditor fuera sometido a juicio político, a petición de la Asociación Civil Centro Michoacanos de Evaluación y 150 ciudadanos más, ello por no dar cumplimiento a sus obligaciones, según el documento exhibido por la CEMIDE, que al parecer desobedeció un mandato legislativo que era investigar un supuesto crédito por mil 300 millones de pesos y rendir un informe que fue que hizo fuera de tiempo.

La solicitud de juicio político en contra del Auditor Superior del Estado, José Luis López Salgado, que fue interpuesta en lo individual por integrantes del Centro Michoacano de Evaluación (CEMIDE), y de otros organismos.

Esta solicitud de juicio político contra López Salgado fue presentada el 4 de diciembre pasado, y fue firmada por 152 ciudadanos, con el argumento de que el titular de la Auditoría Superior de Michoacán ha sido omiso en sus funciones, específicamente en lo mandatado por un decreto legislativo, ligado a la reestructuración de la deuda pública del estado.

El caso es que los representantes populares, mostraron una actitud de sumisión y desecharon la propuesta de juicio político en contra de José Luis López Salgado, llamado el Virrey de la Auditoría, una dependencia donde prevalece la corrupción y las componendas políticas.

Solamente la diputada Yarabí Ávila se atrevió a cuestionar a sus compañeros de bancada y les reclamó el que cara van a pedir el voto, y fue más allá al llamarlos hipócritas y embusteros. Y efectivamente, tuvo mucha razón y demostró tener más pantalones que muchos de los varones diputados que se concretaron a guardar silencio ante los cuestionamientos de la valiente diputada.

Quienes sonrieron de oreja a oreja por ese rechazo fueron sin duda los diputados y ex alcaldes Wilfrido Lázaro Medina, de Morelia, Manuel López Melendez de Panindícuaro, Raúl Prieto Gómez de Charo, entre otros, porque al parecer tienen cuentas pendientes y López Salgado tiene esa información con la que seguramente los chantajea para que no se atrevan a actuar en su contra.

La ASM, se ha convertido en una agencia de colocaciones para los diputados.
Mucho se habla sobre el tema del combate a la corrupción en nuestro país, principalmente en Michoacán donde algunos diputados hablan sobre este mal canceroso, sin embargo, los propios legisladores propician esta enfermedad, pues como lo hemos comentado, guardan silencio en torno a la Auditoría Superior de Michoacán, cuyo auditor José Luis López Salgado se ha convertido en el blanco de las críticas por el alto índice de corrupción que existe en esa dependencia y pese a ello no se le llama a cuentas porque la mayoría de los representantes populares de los diversos partidos le deben favores especiales.

Entre estos diputados que fomentan la corrupción en la ASM y que han recibido esos favores especiales están ex alcaldes que ahora ocupan una curul y que aún tienen cuentas pendientes que aclarar en sus respectivos municipios, como Wilfrido Lázaro Medina, Manuel López Meléndez del PRD, Raúl Prieto Gómez de Charo y otro de apellido Aguilera, que a cambio de su silencio la dependencia de López Salgado guarda bajo llave las auditorías.

Macarena Chávez, del PAN, entre otros, han colocado a familiares y amigos en la Auditoría y aún sí se atreven hablar de anticorrupción y se dan baños de pureza queriendo engañan a los michoacanos con falsos discursos, afortunadamente ya los conocen y saben que tienen doble discurso, que tiran la piedra y esconden la mano. Finalmente quedó evidenciado que los intereses personales de los legisladores están por encima que los de los michoacanos y sigue prevaliendo la impunidad.

¡Descarados!

Otro que se da baños de pureza es el diputado del PRI, Mario Armando Mendoza Guzmán, quien también se convirtió en cómplice porque sabe perfectamente sobre la corrupción existente en la Auditoría Superior de Michoacán, sabe quiénes son los corruptos y quienes la fomentan, pero se queda callado convirtiéndose en cómplice de la corrupción.

Bueno y como saben estamos en tiempos de campaña, así que hay cada “polítiquillo” que no pierde oportunidad para hacerse notar, y un ejemplo claro es el ya candidato a la presidencia municipal de Morelia, Carlos Quintana por la coalición PVEM, MC, PRD, quien hasta ahora se dio cuenta que la nómina del Ayuntamiento que  preside el inepto alcalde independiente Alfonso Martínez Alcázar que a pesar de su fracaso pretende reelegirse, del incremento en el recurso público que se destina al pago de nómina de la administración municipal independiente, que de acuerdo a la Cuenta Pública 2012-2017 y el proyecto de egresos 2018, incrementoì en más de 400 millones de pesos en los últimos tres años, recurso que debería ser destinado a resolver los grandes problemas y rezagos que enfrenta la capital michoacana, en seguridad y por la reducción en inversión en obra pública.

El legislador estatal señaló que el ayuntamiento moreliano tiene la obligación de dar cuentas claras del ejercicio de los recursos, ya que durante 2015 se destinaban cerca de 600 millones de pesos al capítulo mil, mientras que 3 años después, para este 2018,  se tienen proyectados cerca de mil millones de pesos para cumplir con el pago a los trabajadores del cabildo, pese a que no existen mejoras en los servicios que brinda la administración.

“Son pésimos los resultados que ha dado esta administración independiente, los morelianos necesitamos saber a qué se destinarán y en que se han usado nuestros impuestos, debido a que no vemos mejora alguna y cada día estamos peor, señaló Quintana, que hasta ahora descubrió el hilo negro y se dio cuenta que el edil Poncho Martínez es un fracaso.

Pero bueno, repito, son tiempos electorales y Quintana no desperdicia la oportunidad de  exhibir lo que todo mundo ya sabe que es la ineficacia de Poncho y las múltiples irregularidades que existen en su administración.

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