Jorge Herrera Valenzuela
La modalidad impuesta por la partidocracia de dividir en tres etapas el proceso electoral, es una de las veinte mil cosas que a millones de mexicanos les tiene sin cuidado, por lo que en este miércoles, 14 de febrero, habrá fiesta, regalos, abrazos y muuuchos besos. Es el Día del Amor y de la Amistad. Una celebración que tuvo sus inicios allá por el muy lejano año 496 y fue el Papa Gelasio I el que instauró la festividad en honor de San Valentín.
En nuestro país, en el siglo pasado comenzó “la tradición”. Primero se llamó “Día de los Novios” o sea que era para quienes iniciaban o tenían una romántica relación y a las parejas se les veía muy agarraditos de la mano (“manita de torta”) y la comercialización creció a tal grado que hubo un primer cambio en la denominación y pasó a ser el “Día del Amor” y ha terminado en que le conozcamos como “Día de la Amistad”.
La historia de la festividad de San Valentín, surge porque dicho santo está considerado como “el patrono de los enamorados” y por ello en varios países tanto europeos como latinoamericanos, en diferentes fechas, celebran el “Día de los Enamorados”. Cuentan los que saben del tema que en 1832 el escritor Geoffrey Chaucer, en un poema se refirió a San Valentín y la fiesta cobró carta de naturalización y cuando comenzaba el Siglo XV el rey Carlos VI de Francia creó la Corte del Amor y convocó a un concurso para los jóvenes que andaban en busca de pareja.
Tal vez a quienes son asiduos lectores de este diario digital, les extrañe que los distraiga con un tema un tanto simplista y pueden tener razón. Pero, el pero que nunca falta, como aparentemente “silenciaron” la propaganda de los tres “precandidatos” presidenciales, por esta única ocasión descansamos de los comentarios políticos, porque falta mucho y la amenaza es que el próximo Viernes Santo (30 de marzo) emprenderán “en serio” la campaña hasta unos días antes del domingo 1 de julio.
En este, insisto en la denominación, “Día del Amor y de la Amistad”, recuerdo que los yanquis tiene la fecha en un calendario de anécdotas sangrientas y el responsable de ello fue el tristemente célebre Al Capone, quien no quería ni aceptaba que existiera otra banda similar a la de él y por ello se enfrentó a los integrantes de la banda Northe Side Gang que lideraba Reinhardt H. Schwimmer.
Sucedió que aquella noche de San Valentín, los hombres de Capone se vistieron con uniforme de policías (azules) y llegaron hasta una casa donde estaban reunidos los rivales. Se simuló una redada y los sorprendidos bandidos fueron puestos de cara la pared, en un garaje. Esperaban ser esposados, en los momentos en que los falsos policías los acribillaron a tiros. Iban tras de “Bugs” Moran, pero éste logró evadirlo y se fugó del lugar.
Por supuesto que no hay la acostumbrada “pregunta para meditar”, sino el deseo de que cada quien haga feliz a su pareja.
jherrerav@live.com.mx
R A F A G A: Amor, amistad y la noche de San Valentín
