jueves, marzo 28, 2024

OTRAS INQUISICIONES: El pensamiento neoliberal en México

Pablo Cabañas Díaz
En diciembre de 1934 el General Lázaro Cárdenas tomó protesta como Presidente de la República y emprendió reformas estructurales importantes dirigidas a resolver los rezagos sociales y a impulsar el crecimiento y el desarrollo económico de México. En este proyecto, el Estado tenía el papel central como promotor del desarrollo. Este acontecimiento es un parteaguas en el pensamiento económico mexicano porque rompe con la política económica de tipo liberal que se había estado aplicando en el país después de la Revolución Mexicana de 1910, aun en coyunturas como la crisis de 1929. A partir de entonces, dos formas de pensar y resolver los problemas de la economía mexicana estarán en tensión durante todo el siglo XX.
La política económica cardenista de crecimiento con distribución no fue bien vista por un grupo de empresarios, ya que el Estado tenía un papel muy activo en la economía en su búsqueda de un desarrollo económico autónomo y nacionalista, todo ello implicó: el impulso de la reforma agraria (un amplio reparto de la tierra) y con ello la redistribución de la riqueza en el país; el apoyo a los intereses de los trabajadores a través de la formación de sindicatos y el respeto del derecho de huelga. Estimuló la actividad económica mediante un extenso programa de inversiones públicas que impulsó la construcción de grandes obras de infraestructura. En esa dirección, se formó un grupo de instituciones públicas que dirigieran y orientaran la economía, entre las que se encuentran Nacional Financiera y el Banco de Crédito Ejidal. En 1938, Cárdenas nacionalizó el petróleo y creó Petróleos Mexicanos (Pemex) como una empresa estatal.3 El pensamiento económico que emerge en esta época constituye el origen del desarrollismo mexicano, caracterizado por la intervención estatal para asegurar altas tasas de crecimiento, distribución del ingreso y creación de empleo.4 Este enfoque está representado, para ese momento, por Eduardo Suárez, Secretario de Hacienda con los presidentes Lázaro Cárdenas y Manuel Ávila Camacho. Esta perspectiva, con diversos matices, dominó y permeó la política económica del país durante gran parte del siglo XX mexicano hasta principios de la década de los ochenta.
Esta política afectó intereses económicos y dio pie a la construcción de un proyecto alternativo al cardenismo, que representó la recomposición de la corriente liberal que había dominado en el país desde fines del siglo XIX hasta principios de los treinta del siglo XX. Durante todo este tiempo que el pensamiento desarrollista se formó y evolucionó, el pensamiento ortodoxo estuvo presente y construyó sus planteamientos a la par que formó sus instituciones en el país, aspecto que le permitió tomar el poder en la década de los ochenta del siglo pasado. En este ensayo buscamos contestar las preguntas: ¿Cómo se originó el pensamiento ortodoxo en México? ¿Cómo se pudo desarrollar el pensamiento ortodoxo en México con el pensamiento cardenista-keynesiano dominando el escenario de la política económica?
El pensamiento liberal ortodoxo, en opinión de Francisco Suárez se gesta en las décadas de 1920 y 1930.  Este pensamiento es una prolongación del liberalismo del porfiriato de fines del siglo XIX, que se actualiza con los nuevos desarrollos de la escuela liberal de los años 20, sobre todo con la Escuela Austriaca, de Friedrich Von Hayek y Ludwig Von Mises. Este enfoque estuvo representado y desarrollado en México por Luís Montes de Oca y Miguel Palacios Macedo los cuales consideraban que la estabilidad de precios era el objetivo central de la política económica. El talento intelectual de estos dos últimos personajes se articuló con el pensamiento pragmático de hombres de empresa, dos de ellos fueron: Raúl Baillères y Aníbal De Iturbide. Los personajes mencionados son fundamentales para entender las raíces del pensamiento ortodoxo, su desarrollo y la consolidación de su poder en México en el siglo pasado.
Juntos se dieron a la tarea de fundar instituciones que contrarrestaran el planteamiento cardenista en la economía y en la política. En la educación constituyeron instituciones de nivel superior que proporcionarán una alternativa a la ideología de izquierda en las universidades del Estado concretamente a la ideología de la Escuela de Economía de la UNAM, fundada en 1929, por un grupo de intelectuales nacionalistas.
En este proceso de formación de la escuela de pensamiento económico ortodoxo en el país, Ludwig Von Mises y Friedrich Hayek, tuvieron una influencia intelectual importante. Ambos pertenecían a la llamada Escuela Austriaca. Los dos profesores tenían una firme oposición a cualquier economía planificada y asociaban la libertad al mercado. Su influencia en México radicó en que ayudaron a fortalecer los planteamientos, la retórica, de los grupos de empresarios e intelectuales que estaban en desacuerdo con la corriente del nacionalismo económico. La pregunta que surge es ¿Cómo se articuló la resistencia contra el cardenismo con la Escuela Austriaca? En el grupo intelectual el papel central lo tuvo Luís Montes de Oca, él estudió y conoció la obra de Von Mises y Friedrich Von Hayek; estableció relación con ellos y alimentaron intelectualmente sus posiciones. Por parte del grupo pragmático empresarial, Raúl Baillères sostuvo financieramente este proyecto, unidos construyeron y dieron fuerza política a la corriente del liberalismo en el país.

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