Pablo Cabañas Díaz/ Desde el año 2000 con el triunfo de Vicente Fox la situación política nacional se encuentra marcada por una constante falta de legitimidad de las instituciones y de los partidos políticos. Esta situación llevó a que los ciudadanos pierdan la confianza en sus líderes. Este es el contexto en el que Emilio Álvarez Icaza, presentó el movimiento “Ahora”, con el intenta promover su candidatura independiente a la Presidencia de la República. Para lograrlo, el también ex ombudsman de la Ciudad de México, confía en que la ciudadanía del país despierte y no dé sus votos a los partidos políticos tradicionales.
Álvarez Icaza ha sido muy crítico contra Andrés Manuel López Obrador “… creo honestamente que la historia demuestra, al menos en América Latina y en otras latitudes, que esta idea de que con la izquierda no tenemos que decir nada llevó a autoritarismos muy peligrosos”, afirma.
El pasado domingo el líder de “Ahora” en su egocéntrica auto descripción rememoró cómo fue cuestionado desde el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en 2006, cuando era Presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal y dio entrada a más de 900 quejas por el plantón instalado en Paseo de la Reforma contra el resultado de la elección Presidencial. También, cómo ese mismo año asambleístas del Partido Acción Nacional (PAN) lo expulsaron de la sesión en la que se aprobó el dictamen de la Ley de Sociedades de Convivencia. En 2014, menciona cómo sectores afines al Partido Revolucionario Institucional (PRI) promovieron una denuncia en su contra por haber firmado, en su carácter de Secretario Técnico de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el acuerdo que permitió el trabajo del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que exhibió las fallas del Gobierno federal en la investigación del paradero de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa
Álvarez Icaza llega a las elecciones presidenciales del 2018, con un discurso de predicador. El candidato describe al sistema político tradicional como el culpable de todas las desdichas de la sociedad y para abolirlo recurre a expresiones emotivas . No hay proyecto de país y no ofrece una visión alternativa a los graves problemas que afronta México.
Lo mercadológos que acompañan al candidato buscan que aparezca como un outsider para así poder presentarse como la antítesis de los políticos tradicionales a los cuales acusa de ser los causantes de la ingobernabilidad, y la corrupción. Álvarez Icaza hace un uso exhaustivo de los medios de comunicación en los que expresa la misma palabrería de los políticos tradicionales.
