miércoles, abril 24, 2024

“Los Malvados se alzarán” de Danielle Paige

Portada de “Los malvados se alzarán” de Danielle Paige/ Cortesía: Penguin Random House

CIUDAD DE MÉXICO, 21 de mayo, (AlMomentoMX).- La joven escritora Danielle Paige nos relata una historia, llena de misterio e intriga: Ha llegado una nueva chica a Oz. Viene de Kansas y tiene una misión: encontrar a Dorothy, destruir el camino amarillo, salvar su hogar.

Para convertir Oz de nuevo en una tierra libre, a Amy Gumm le fue asignada una misión: arrebatarle el corazón al Hombre de Hojalata, robar el cerebro del Espantapájaros, despojar al León de su valor y la consigna final: Dorothy debe morir.

Pero Dorothy aún continúa con vida. Y ahora la Orden Revolucionaria de las Brujas ha sido desterrada y la misteriosa princesa Ozma puede que se la única aliada de Amy para llevar a cabo su misión. Conforme Amy va descubriendo toda la verdad de la tarea que le fue encomendada, se dará cuenta de que su verdadera casa en Kansas puede que también esté en peligro.

En un mundo en el que la línea entre el bien y el mal es tan frágil como el viento, ¿en quién podrá confiar Amy y quién realmente está embrujado?

FRAGMENTO:

“Ciudad Esmeralda estaba envuelta en llamas.

Me alejé de aquellas gigantescas columnas de humo y me sumergí en la oscuridad de la noche; me sostenían los peludos y esqueléticos brazos de un mono. Bajo nuestros pies, la ciudad se había convertido en un montón de diamantina y ceniza. De lejos, parecía una fiesta infantil que alguien hubiera arruinado. Las inmensas torres y los rascacielos, hasta entonces majestuosos e imponentes, estaban desmoronándose. Tras cada caída se producía una explosión de confeti de piedras preciosas y cristales color esmeralda. Habría sido un espectáculo precioso de no haber sido por aquel nubarrón de humo oscuro y denso que se cernía sobre la ciudad.

Estaba lejísimos de Kansas.

Lo que estoy a punto de decir tal vez te sorprenda. A diferencia de otros, nunca he tenido ganas de volver allí. No es un lugar muy apasionante que digamos. Y, aunque los clichés siempre me han parecido una ridiculez, empiezo a creer que hay uno en particular que siempre se cumple. No puedes volver a casa. Ejemplo A: Dorothy. Trató de volver a casa en dos ocasiones y no hace falta explicar qué sucedió.”

AM-MX/mla

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